Amigos con principios

Es invaluable el poder de la amistad, sobrepasa las circunstancias, condiciones del ser e incluso la incertidumbre del porvenir. Los amigos sinceros ven las fortalezas y también disciernen las debilidades. Son paraguas en tiempos de lluvia, bastón en épocas de enfermedad y lentejuelas en vísperas de fiesta. Ellos no siempre están, pero cuando es el momento indicado, harán acto de presencia. Escoger las amistades es como escoger donde vivir, porque estas personas serán trompetas que resuenan en el diario transitar del corruptible existir.

Hay diferentes tipos de amistades, unas son más profundas y sempiternas, otras son fugaces pero no menos valiosas. Te acompañan a bordo de una barca, sujeta a días soleados de gran pesca y días de tormentas, que te hacen pensar que el final ha llegado. Las amistades con principios te ayudarán a crecer, te ajustarán la fórmula de los lentes cuando sea necesario, en ocasiones mucho mejor que un oftalmólogo, serán padres o madres por un par de minutos, o gritarán a tu oído ¡levántate! para que no permanezcas dormido.

Este tipo de personas incomodan, son gente de avanzada pero siempre serán sinceros y si callan algo, lo harán por prudencia y respeto, no para mentir. Las personas con principios son positivas, motivantes y generan atmósferas de esperanza. Te prometen con sus propias historias que la vida nunca se vuelve más fácil, al contrario, pero que siempre es más beneficioso ser resiliente y florecer en medio del desierto. Los amigos con principios te animan, ofrecen alternativas, te consuelan sin tener lastima, dan pasos confiables contigo.

Algunos amigos se convierten en familia y pasan a tener mayor importancia que muchos consanguíneos, no por falta de amor o descuido, sino porque son personas con códigos y herramientas de vida que te enseñan, esto los hace gente de propósito. Atesorar personas así, en el entorno más inmediato, puede ser un recurso que te salve a vida. Se caracterizan por ser innegociables, a esas personas no las puedes sustituir, debes escucharlas con afecto y percibir el profundo amor y respeto que te tienen, para tomarse el tiempo y las molestias que pueden significar acompañarte o escucharte en ciertos momentos de la vida.

Los aliados son personas a las que nunca podrás retribuir con nada más que el mismo cariño, respeto y atención que te han brindado, porque no les mueve lo material, son seres luminares en cuerpos que metabolizan a otro nivel, lo que el entorno les proporciona. El transitar nos aproxima varias personas con estas características, ser astuto en identificarlas y diligente en atesorarlas es un axioma de madurez.

El que es amigo se muestra amigo, por lo que seres de principios atraerán similares en fundamento y valoración. Esto resulta justo y sublime, como la gentileza de sonreír a un extraño, o un acto de amor, por otro ser vivo que requiera ayuda o intervención. Meditar en las personas que nos rodean, y el enorme valor que aportan a nuestras vivencias resulta necesario. Procurar sustituirlas es primordial, si en lugar de dar aportes retrasan, oscurecen los cielos, menosprecian los caminos o los sueños que se albergan.

No olvidemos cultivar un entorno saludable, de avanzada y que amen, porque nunca se sabe cuándo se convertirán en preservadores de vida.

@alelinssey20