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Algún día cuando corresponda, más temprano que tarde, los venezolanos debemos agradecer al pueblo de Uruguay y muy especialmente a su embajador ante la Organización de Estados Americanos, Washington Abdala, por haber identificado al régimen de Venezuela tal cual es, por haber llamado las cosas por su nombre y dejar en claro, sin ambages y sin miedo, que Nicolás Maduro se robó las elecciones recientes cuando fue derrotado por Edmundo González Urrutia
Pero con mucha más razón estaremos en deuda con el secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, un abogado, diplomático y politico uruguayo que desde el año 2015 ejerce ese cargo.
Antes fue embajador de la República del Uruguay en China y ministro del presidente José “Pepe” Mujica
La lucha por el rescate de la democracia y la libertad de Venezuela ha sido una constante en el desempeño de Luis Almagro como secretario general de la OEA , y nuevamente ha tomado el “robo electoral” que sufrimos los venezolanos como un tema que su administración debe y puede resolver
Almagro ha sabido sobrevivir a los ataques despiadados de la entente chavista que casi se apodera de la América del Sur, zona geográfica a la que pertenece su país. Suponemos también que ha debido vencer al arma más terrible y efectiva con que cuenta la revolución bolivariana : La petrochequera, que aunque disminuida, todavía se garantiza algunas solidaridades internas a costa de un fajo de dólares y otras lisonjas y canonjías
No le ha sido fácil a este caballero, de verbo sereno pero enérgico, de andar pausado pero a punto de constancia y preparación política e intelectual, mantener vivo el escenario indicado para motorizar el cambio en Venezuela, obligando al régimen a reconocer su derrota electoral y la entrega del poder
Entiende el señor Almagro cuál es su principal misión y ahora cuenta con la mayoría dentro del organismo regional y el apoyo de la Unión Europea y de muchos países que en sus parlamentos han aprobado el reconocimiento de Edmundo González Urrutia como el legítimo presidente electo de Venezuela
Así, con ese apoyo casi unánime dentro de la OEA, ha acudido a la Corte Penal Internacional a solicitar acciones para la detención y prisión de Nicolás Maduro