Envuelto en alucinaciones, cercado por delirios de grandeza, fascinado y seducido en ser el nuevo Fidel pero militar sin trayectoria ni universidad, rodeado de gárrulos, santeros, brujerías y consejos castristas, puso en marcha un chantaje con el esquema de petróleo barato para desamparados, indigentes y descuidados de América -incluyendo alguna localidad afrodescendiente en Nueva York- buscando ganarse -comprando- cariño, afecto, notoriedad y agradecimiento internacional, no del imperio que nunca lo tragó, si al menos con los agredidos por el imperialismo en Latinoamérica y el Caribe. Aquel Petrocaribe hoy imposible de atender y la Alianza de los Pueblos de nuestra América que a nadie importa.
Como la mayoría de los sueños chavistas el ALBA –cuyo propósito es luchar contra la pobreza y exclusión social, sobre la base de la colaboración y complementación política, social y económica entre sus países miembros- y demás ruinas, se desvaneció entre olvidos, imprevisiones, dejadeces y abandonos hasta que, ¡otra vez un imperialista!, lo revivió, aunque sólo para un breve período de turismo en la isla donde Díaz-Canel gobierna sin luz ni luces. Sazonada con espantosas babosadas mañaneras del subcomunista mexicano López Obrador. El Petro colombiano pero con guitarra sexta, la panzona o vihuela, trompetas, violín, contrabajo y guitarrones rancheros.
El veterano con dificultad de espacio y que en Washington anda de un lado a otro arrastrando pies, logra, junto con su camarada Putin, que Alemania plantee seriamente ser potencia, líder de Europa no sólo en lo económico sino en lo militar y que, enmarañados en tuberías de petróleo y gas que deben suministrar, comenzando por Rusia que demuestra con claridad y contundencia, menos de lo que fanfarronea y alardea. Y el mundo de los avances tecnológicos retoma como propio y conveniente la denostada energía nuclear. La ruso-ucraniana Chernobyl, y la japonesa Fukushima reventaron por sí mismas, para enseñar a los expertos fallas posibles y posterior prevención.
No son los primeros, Francia es una potencia económica, industrial, militar y nuclear, llevando un par de pasos adelante, mientras ellos, los europeos y estadounidenses discuten como organizarán el futuro inmediato; y en América Latina seguimos creyendo en estultas revoluciones de asesinos comunistas y ladrones socialistas.
No obstante, no es malo dejar de recordar al presidente y sus empleados influentes, empeñados en hacer creer que Venezuela está mejor, transformando campos de cultivo para delincuentes, narcotraficantes y homicidas, sustituidos de inmediato cuando la policía los da de baja. Y que sigue habiendo una prestigiosa cumbre sobre economía a la cual asisten los más acreditados del mundo.
De Bruselas y Davos se sacan consecuencias, caminos a seguir; de La Habana, habladera de bolserías y pendejadas, los que asisten al ALBA no tienen capacidad, talento ni trascendencia, son mequetrefes comunistas y majaderos socialistas. La reunión de la Cumbre de las Américas es para analizar, debatir sobre problemas y desafíos que enfrenta el continente americano, así como afianzar la integración hemisférica, la responsabilidad nacional y colectiva, a fin de mejorar el bienestar económico y seguridad de los ciudadanos de los países participantes en Los Ángeles tiene cierto parecido, pero al menos estará al frente el líder del mundo libre.
@ArmandoMartini
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