OPINIÓN

Adiós, Juan González

por Pedro Mario Burelli Pedro Mario Burelli

Artículo sobre salida (¿forzada?) de Juan Sebastián González Román del cargo de director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional. Cargo que le quedó grande y desde el cual hizo mucho daño a la región y en particular a Venezuela. A la detallada nota de David Alandete, agregaría varias cosas:

1. El viaje a Caracas en marzo de 2022 se vendió como una misión para separar a Nicolás Maduro de Vladimir Putin. Así lo filtró la Casa Blanca al New York Times. En esa fábula jugó un gran rol un consentido de Joe Biden de nombre Amos Hochstein, pero González y el defenestrado Jimmy Story se creyeron el cuento. ¿Cómo les salió esa jugada? Ya veremos el 20 de febrero cuando aterrice el canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, en Caracas. Me huele que fallaron… por un largo trecho.

2. El de Cartagena siempre dijo que la crisis de Venezuela era un tema que “los venezolanos teníamos que resolver entre nosotros”. Pero cuando se metió a negociar directamente con Jorge Rodríguez hizo lo que le dio la gana, informaba muy poco o nada a la oposición venezolana, y, como anticipamos algunos, el régimen se burló de él y de su gobierno sin esfuerzo o costo. Ahora los venezolanos tenemos que pagar los platos que él rompió viajando por medio mundo creyéndose Ben Rhodes y Ricardo Zúñiga (los negociadores de Barack Obama con Alejandro Castro Espín, el hijo de Raúl Castro). González soñaba con pasar a la historia como un gran negociador y será recordado como un irresponsable.

3. González le creyó a Jorge Rodríguez cuando este le dijo que si Estados Unidos dejaba de reconocer a Juan Guaidó, Maduro negociaría de “buena fe”. Crédulo, repudió y humilló a Guaidó en contra de la opinión de los timoratos del Departamento de Estado y, más grave aún, de aliados claves de Estados Unidos (Canadá, Reino Unido y Alemania). A los dos meses, el secretario Antony Blinken no tuvo más remedio que informar a Dinorah Figuera, presidenta de la Asamblea Nacional 2015, que Estados Unidos la reconocía como jefa del gobierno interino de Venezuela en virtud del artículo 233 de nuestra Constitución. Algo insólito en los anales de la diplomacia e ilustrativo de la ingenuidad criminal que define al equipo Biden (antes de que me acusen de tomar lado, dejo claro que fui crítico de algunas de las torpezas del equipo Trump con relación a Venezuela). [Nota: Aprovecho para honrar a la Dra. Figuera por la labor digna y ecuánime que ha hecho evitando que Maduro sea reconocido como legítimo por países claves, y a la vez por la forma en que ha enfrentado las embestidas demenciales de algunos en Primero Justicia].

4. González apostó a que la opción electoral que lo ayudaría a normalizar a la dictadura de Maduro era Henrique Capriles. Se montó en esa narrativa y el 22 de octubre de 2023 fue sorprendido por el abrumador triunfo de la “radical” María Corina Machado. Su rol como negociador creíble se terminó de esfumar ese día. (Por cierto, igual le ocurrió en Argentina donde apostó a Sergio Massa, el continuista de la peste K, para encontrarse con Javier Milei de presidente). Dicho todo esto, González no se designó y mantuvo solo en su puesto. El presidente Biden ignoró las críticas que le llegaban sobre la gestión de González. Biden tiene mala fama de no saber despedir a gente que no sirve. Pero tampoco ayudó su Consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, a quien Latinoamérica parece importarle poco o nada. Estados Unidos tendrá muy difícil mantener su influencia en el hemisferio si siguen errando los presidentes y secretarios de Estado en los nombramientos claves para la región. En la era Reagan se decía “personnel is policy”, o, dime a quien nombras y sabremos cuál es la política. Deseo a Daniel Erikson, sucesor designado de Juan González, todo el éxito en el poco tiempo que queda de esta administración. Siguiendo de cerca la evaluación de la región que se hace desde el Departamento de Defensa y desde el Comando Sur, creo que Erikson llega a la Casa Blanca con experiencia relevante y sin margen para equivocarse o ser ingenuo. Suerte.

Artículo de Alandete en el diario ABC

Originalmente publicado en la cuenta de X del autor @pburelli