José Luis Rodríguez Zapatero, ex jefe de gobierno de España, recalcó este viernes que la continuación del diálogo es la única vía para intentar reconducir la crisis venezolana frente a la posibilidad de un conflicto.
Zapatero, que ha sido criticado en las últimas semanas por su insistencia en mantener un proceso de diálogo entre el gobierno y la oposición venezolanos, lamentó que la palabra diálogo está siendo demonizada hasta situarla en un nivel delictivo.
«Si no hay diálogo, no hay futuro de convivencia. Todas las políticas que niegan el diálogo en Venezuela y que lo demonizan son políticas que abocan al conflicto», insistió el político español.
Zapatero ha ejercido como mediador a título personal entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, junto a los ex presidentes Leonel Fernández, de República Dominicana, y Martín Torrijos, de Panamá.
El ex mandatario español habló este viernes sobre su papel en Venezuela durante la presentación en Casa de América de Madrid de la Cátedra Cartagena de Integración Iberoamericana, promovida por el ex presidente colombiano Ernesto Samper.
Zapatero negó que el gobierno de Maduro rechace el diálogo y recordó que a comienzos de este año todo estaba preparado para la firma en República Dominicana de un acuerdo para celebrar elecciones y, a última hora, uno de los líderes opositores rechazó sumarse, lo que propició que la oposición se presentara desunida a los comicios presidenciales de mayo pasado.
«Una parte de la oposición que podríamos llamar más radical no quiso asumir ir a un proceso electoral», añadió Zapatero, al tiempo que consideró que «si la mayoría de la oposición hubiera participado, yo creo que hubieran ganado».
La mediación del político español ha recibido críticas, como la del secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, quien en septiembre pasado le pidió «que no sea imbécil».
Zapatero también criticó la hipocresía y cinismo de algunos gobiernos que denunciaron la emigración masiva de venezolanos de los últimos meses pero, en su opinión, no les facilitaron la entrada en sus países, y señaló como ejemplo a Estados Unidos.