Más de 30 personas murieron y otras 40 resultaron heridas luego de la estampida ocurrida en el funeral del General iraní Qassem Soleimani en su ciudad natal, Kerman.
El incidente de produjo por la gran cantidad de personas que asistieron a los actos fúnebres.
Videos publicados en las redes sociales muestran a iraníes corriendo, otras recibiendo asistencia médica y cuerpos tendidos en el suelo.
Said Namakí, ministro de Salud, se trasladó a Kerman para supervisar y dirigir las labores de emergencia.
Qasem fue asesinado el pasado viernes en un bombardeo selectivo de Estados Unidos en Bagdad.