Grupos de manifestantes se movilizaron este lunes en Colombia contra la violencia policial y en rechazo al gobierno, tras las sangrientas protestas que desató el reciente homicidio de un hombre a manos de dos uniformados.
En medio de algunas restricciones por la pandemia, sindicatos y organizaciones estudiantiles programaron durante la jornada caravanas, marchas y concentraciones en varios puntos del país.
La actividad se realiza en Bogotá, donde cientos de jóvenes con mascarillas regresaron a las calles. Esto a pesar de la desconfianza y la rabia que dijeron sentir frente a la policía.
«Esto de hoy es un estallido de lo que se ha venido acumulando hace rato. ¡Por fin la gente se dio cuenta! Y ver cómo, frente a una cámara, matan a alguien indefenso hizo que saliera a las calles», señaló a la AFP Diego, universitario de 23 años de edad que evitó dar su apellido para no ser identificado por la autoridad.
La policía calculó que unas 4.800 personas participan en los actos de protesta, que transcurren sin enfrentamientos. Así lo afirmó Óscar Atehortúa, máximo comandante de la institución.
Bogotá también fue el foco de las manifestaciones que siguieron a la mortal paliza que recibió Javier Ordóñez el 9 de septiembre.
Ese día el ingeniero de 43 años, quien estaba a punto de completar sus estudios de Derecho, fue sometido en el suelo a repetidas descargas con un arma eléctrica y a golpes que le ocasionaron la muerte, de acuerdo con la Fiscalía.
Dos uniformados que llevaron a cabo la detención, en respuesta supuestamente a un intento de agresión contra ellos, están siendo procesados por tortura y homicidio agravado.
Por una reforma
El video viral que registró el castigo contra el ingeniero y padre de dos hijos desató las protestas contra la policía.
Uniformados reprimieron a los manifestantes con armas de fuego en jornadas que dejaron 12 muertos, en su mayoría jóvenes alcanzados por proyectiles.
También hubo más de medio millar de heridos, entre ellos numerosos uniformados, en tanto que decenas de puestos de la policía quedaron destruidos.
El gobierno colombiano, que pidió perdón por la muerte de Javier Ordóñez, denunció que comandos urbanos de las guerrillas orquestaron los ataques contra la institución armada.
«Se rompió cualquier tipo de confianza que había entre la policía y la población. Habrá que reformarla, desmilitarizarla, separarla del Ministerio de Defensa, sobre todo quitarle la idea de que la ciudadanía es el enemigo», comentó este lunes William Díaz, profesor universitario de 50 años.
Vigiladas de cerca por agentes antidisturbios, las marchas avanzaron en dirección al centro de Bogotá con proclamas contra los excesos policiales y también en rechazo a la crisis económica que trajo la pandemia.
Laura Frías, universitaria de 21 años, alzó la voz contra la reciente ola de masacres asociadas al conflicto colombiano que alimenta el narcotráfico.
Al mismo tiempo reclamó por la decisión del gobierno de lanzar un millonario salvavidas a la aerolínea Avianca, «mientras hay chicos que no tienen para una matrícula».
A finales de 2019, Colombia vio crecer un inédito movimiento de protesta que reunió a multitudes que reclamaron un cambio de rumbo al gobierno de Iván Duque.
Con la emergencia sanitaria, el malestar social pareció ceder pero ahora que las autoridades levantaron la cuarentena -aun con el virus circulando- las organizaciones sociales prometen escalar las manifestaciones contra la gestión del mandatario.