MUNDO

Venezuela y Guyana se comprometieron a resolver la situación del Esequibo

por El Nacional El Nacional

Los ministros de exteriores de los dos países participaron el pasado domingo y lunes en una nueva ronda de conversaciones en Nueva York y se comprometieron a seguir explorando opciones para la resolución de la controversia fronteriza, indicó la ONU en un comunicado.

La organización, que media en este proceso, dijo que las dos delegaciones intercambiaron puntos de vista y estudiaron un posible acuerdo completo para solucionar la situación del Esequibo.

Las reuniones del domingo y el lunes fueron similares a otra reunión celebrada a finales de octubre. El proceso se está desarrollando con mucha discreción.

Según la ONU, tanto el canciller venezolano, Jorge Arreaza, como su homólogo de Guyana, Carl Greenidge, reafirmaron su compromiso con este proceso y acordaron reunirse nuevamente para seguir conversando.

Las discusiones están siendo facilitadas por Dag Nylander, el representante especial para este asunto del secretario general de la ONU, António Guterres.

Nylander fue nombrado el pasado febrero por Guterres en un nuevo intento para tratar de resolver el litigio sobre la región del Esequibo.

Esa zona, que supone dos terceras partes del territorio de Guyana, está bajo mediación de la ONU desde la firma del Acuerdo de Ginebra en 1966, pero la disputa territorial se agudizó en 2015 después de que la estadounidense Exxon Mobil descubriera yacimientos de petróleo en aguas del área del litigio.

El gobierno de Venezuela emitió en la misma época un decreto presidencial que dictaba una orden administrativa de defensa del país, con una demarcación que incluía como propias todas las aguas del Atlántico frente a la costa de Esequibo.

El decreto presidencial venezolano causó  rechazo en el gobierno guyanés y disparó la tensión entre las dos partes, que desde entonces han acudido en numerosas ocasiones a la ONU para defender sus posturas.

La ONU decidió dar a Nylander un mandato fortalecido de mediación para buscar avances hasta el final de 2017.

Si para entonces las Naciones Unidas evidencian que no hay un progreso significativo para resolver la controversia, Guterres derivará el caso a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en La Haya, a no ser que los dos países le pidan explícitamente que no lo haga.