Una treintena de detenidos y algunos heridos dejaron este martes en Perú las protestas contra la asunción del nuevo presidente Manuel Merino y en apoyo al destituido mandatario Martín Vizcarra, informaron la policía y medios locales.
Las manifestantes tuvieron lugar en la zona central de Lima, donde fueron desplegados unos 600 policías que lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar las protestas. Varias personas resultaron heridas por perdigones disparados por los agentes, según el portal de noticias IDL Reporteros, que no precisó la cantidad.
«La policía lo que está haciendo es controlarlos (a los manifestantes). Al parecer estos señores están cometiendo actos violentos”, dijo el general José Luis Cayas a la radio RPP.
Bombas lacrimógenas
Agregó que la policía lanzó bombas lacrimógenas para evitar los contactos entre manifestantes y policías a fin de prevenir contagios de covid-19.
Unas 30 personas fueron detenidas y llevadas a dos comisarías, según fuentes policiales.
Por su parte, la organización humanitaria Amnistía Internacional exigió a las “autoridades peruanas detener inmediatamente la represión de las manifestaciones. Además de garantizar derechos de todas las personas”.
«Amnistía Internacional recibió fotografías y videos donde se muestran efectivos de la Policía Nacional exhibiendo armas de fuego y disparando gas lacrimógeno y municiones contra manifestantes y periodistas», indicó la organización en un comunicado.
Otras manifestaciones similares se registraron en las ciudades de Arequipa, Trujillo, Cusco, Huaraz, Piura, Moquegua, Loreto, Puno y Huancayo, según medios peruanos.
En Cusco, unos manifestantes apedrearon el local de Acción Popular, partido del presidente Merino.
«Estamos en la calle para reclamar, Merino no es nuestro presidente», dijo Crisbel, de 28 años, mientras manifestaba en la plaza San Martín de Lima.
«Varios periodistas y reporteros gráficos fueron agredidos por la policía cuando cubrían las protestas», dijo la ONG Intituto Prensa y Sociedad (IPYS).
Merino asumió como nuevo presidente en medio de temores de los mercados, lo que se tradujo este martes en el desplome de 6,5% de la Bolsa de Lima.