Un terremoto de magnitud 5,1 causó este viernes dos muertos y más de una treintena de heridos en Teherán y otras localidades de los alrededores, donde se vivieron escenas de pánico y los servicios de emergencia siguen en alerta.
El epicentro se ubicó cerca de la población de Damavand a una profundidad de 7 kilómetros, según el Centro Sismológico de Irán.
El director de la Organización de Gestión de Crisis de Irán, Esmail Nayar, informó a la agencia oficial IRNA de que un hombre de 60 años de edad falleció de un traumatismo en la cabeza mientras corría para huir de su vivienda en Damavand.
En Teherán, una chica de 21 años murió por un infarto coincidiendo con el temblor, indicó por su parte el responsable de la Gestión de Crisis de la capital, Mansur Darayatí.
Los heridos ascienden a 33, 18 de ellos en Damavand y 15 en Teherán, de los cuales cuatro siguen hospitalizados.
Los Servicios de Emergencias enviaron varios equipos a las zonas afectadas para evaluar los daños, aunque por el momento no se ha informado de derrumbes o casos graves.
El seísmo tuvo decenas de réplicas, la más fuerte de una magnitud de 3,9, por lo que la gestión de crisis sigue en alerta, un estado que puede mantener hasta tres días.
El miedo a que ese primer temblor, registrado a las 12.48 de la medianoche, fuera seguido de otro más potente que provocó derrumbes llevó a muchos ciudadanos en Teherán a abandonar sus hogares.
Numerosos teheraníes permanecieron durante horas en sus vehículos en medio de la calle o en espacios abiertos como parques después de que el temblor se sintiera con fuerza en la capital, según pudo constatar Efe.
Entretanto, el Ayuntamiento habilitó polideportivos y estadios para aquellos que prefirieran pasar allí la noche.
Fuerte actividad sísmica
El último movimiento telúrico destacado que sacudió Teherán ocurrió en diciembre de 2017 y tuvo una magnitud de 5,2.
Irán tiene una fuerte actividad sísmica ya que está situado en el límite de varias placas tectónicas y se encuentra atravesado por varias fallas.
En noviembre de 2017, un terremoto de magnitud 7,3 causó 620 muertos y más de 12.000 heridos en la provincia de Kermanshah, mientras que en diciembre de 2003 cerca de 30.000 personas perecieron en otro en la localidad sureña de Bam.