Turquía pidió este martes que el acuerdo que permitió exportar cereales desde los puertos ucranianos se mantenga al margen del conflicto por la invasión rusa de Ucrania debido a su importancia para la seguridad alimentaria mundial.
«El acuerdo de exportación de grano ha contribuido en gran medida a aliviar la crisis alimentaria mundial, ya que se han enviado casi 10 millones de toneladas de grano a quienes lo necesitan, y ha demostrado que la ‘cooperación y el diálogo’ resuelven los problemas», declaró el ministro de Defensa de Turquía, Hulusi Akar.
El Ministerio de Defensa de Turquía difundió un comunicado en el que expone la posición del país después de una conversación entre Akar y su homólogo ucraniano, Oleksii Reznikov, así como con el titular de Infraestructuras ucraniano, Oleksandr Kubrakov.
En la conversación se abordó la salida de Rusia del acuerdo que desbloqueaba la exportación de grano y otros alimentos desde los puertos de Ucrania y del que Turquía, al igual que Naciones Unidas, también es parte.
«La iniciativa del envío de grano, que es una actividad puramente humanitaria, debe separarse de las condiciones del conflicto», subrayó Akar.
Turquía ha mantenido en las últimas horas una intensa diplomacia telefónica para mantener a flote el acuerdo de cereales, del que Rusia anunció su salida tras el ataque ucraniano del sábado a naves militares rusas en Sebastopol, en la anexionada península ucraniana de Crimea.
Pese a la suspensión del acuerdo, se espera hoy la llegada a Estambul de buques graneleros que utilizaron el corredor humanitario para exportar grado a distintos países de África, Asia y Europa.
Entre los barcos de carga que se esperan que lleguen a las costas del Bósforo hoy, según el diario Hürriyet, está el «Ikaria Angel», cargado con 40.000 toneladas de cereales para Etiopía, que sufre una grave hambruna.