El líder izquierdista griego Alexis Tsipras recibirá el mandato formal para formar gobierno por segunda vez hoy, tras su inesperada y decisiva victoria en unas elecciones generales anticipadas que vieron como la mayoría de los partidos de Grecia se comprometieron con los compromisos del programa de rescate al endeudado país.A sus 41 años, Tsipras domina la política griega tras haber derrotado tanto a la oposición de centro derecha como a los rebeldes de su propio partido y a pesar de un duro giro en su política, que mantuvo al país en la eurozona a costa de abandonar su posición contraria al rescate con la que llegó al poder por primera vez en enero.Tsipras anunció de inmediato que renovará su coalición proeuropea con el pequeño partido populista de derechas Griegos Independientes (ANEL), que en contra de lo que pronosticaban las encuestas logró los votos suficientes para tener representación parlamentaria.Con más del 99.7% del escrutinio completado, la formación de Tsipras, Syriza, tenía el 35.5% de los votos, mientras que la formación de centro-derecha Nueva Democracia estaba segunda con el 28.1%. Sin embargo, en una señal de descontento generalizado, más de cuatro de cada 10 griegos se abstuvieron, y el 7% de las papeletas fueron para el tercer partido más votado, Amanecer Dorado, fundado como movimiento neonazi en la década de 1980.Hace apenas dos meses, Syriza abandonó sus promesas para respaldar más recortes en el gasto, subidas de impuestos y reformas laborales que les permitieron acceder a un tercer paquete de rescate por importe de 97,000 millones de dólares que aseguró la subsistencia del maltrecho país. Tsipras dijo que aliviará en lo posible los nuevos e inevitables recortes y reformas de pensiones que su gobierno debe implementar para seguir recibiendo los préstamos internacionales.»Vamos a suavizar ciertos elementos del acuerdo, sin romper nuestros compromisos (de rescate)», dijo hoy Dimitris Mardas, viceministro de Finanzas en el primer gobierno Tsipras.Las bolsas griegas abrieron con un descenso de más del 1%, pero se mostraron planas avanzada la mañana.Muchos griegos mostraron su recelo hacia los recortes inminentes, que llegan luego de seis años de medidas de austeridad que redujeron el valor de su economía en un cuarto y aumentó el desempleo al 25%.»Estoy contento de que Tsipras haya salido elegido, pero debe funcionar», dijo Kostas Tabaris, un mecánico de 54 años. «Debe (llevar a cabo) las reformas, solucionar la crisis, ayudar a los pobres, dar regalos, dinero a todo el mundo».El funcionario Nikos Georgopoulos, de 40 años, dijo que el resultado de los comicios lo decepcionó.»Soy pesimista porque ya sabíamos que línea política seguirá», dijo. «La política del tercero (rescate). Así que sabemos que el pueblo griego no puede esperar nada bueno».Después de solo siete meses en el cargo, Tsipras perdió la mayoría en el Parlamento cuando legisladores disconformes del ala más a la izquierda de su partido se opusieron a las nuevas duras condiciones exigidas por la eurozona para entregar el paquete de ayudas de 97,000 millones de dólares: Subidas de impuestos sobre ventas y negocios, cambios en la administración pública y en la legislación laboral a los que se oponen los sindicatos, y más recortes de pensiones para hacer frente al dramático envejecimiento de la población helena.Los rebeldes, que formaron un nuevo partido, no lograron obtener representación parlamentaria.El nuevo gobierno tendrá una mayoría de tan solo cinco escaños ? y poco tiempo que perder.Los acreedores del país revisarán el avance de las reformas exigidas por el rescate el próximo mes, y el gobierno tendrá que elaborar el borrador del presupuesto estatal para 2016. Además debe supervisar el criticado programa de recapitalización bancaria según el cual ahorradores con más de 113,000 dólares en sus cuentas se verán obligados a contribuir.Un total de ocho partidos lograron representación parlamentaria, incluyendo el en su día poderoso socialista Pasok, el centrista Potami, el Partido Comunista Griego y la Unión Centrista ? un partido marginal liderado por Vassilis Leventis, un comentarista político conocido por sus arrebatos de ira durante sus apariciones en su longevo programa de televisión.