Donald Trump, presidente de Estados Unidos, apostó este jueves por alimentar el suspenso, en el inicio de una nueva ronda de conversaciones comerciales con China. Primeramente, se mostró escéptico sobre la posibilidad de un acuerdo. Sin embargo, horas después se mostró optimista ante la reunión que tendrá el viernes con Liu He, ministro chino.
En una semana entrará en vigor una nueva subida de aranceles a importaciones chinas. Washington sancionó funcionarios y empresas chinas, vinculadas con represión de minorías musulmanas en el oeste de ese país.
“Gran día de negociaciones con China. Ellos quieren un acuerdo, ¿pero lo quiero yo?”, señaló Trump en Twitter.
A continuación, añadió que se reunirá con el viceprimer ministro chino el 11 de octubre en la Casa Blanca.
Horas más tarde de su mensaje en la red social, Trump declaró a los periodistas que las negociaciones con China “están yendo muy, muy bien”.
Mesa de negociación
Stephanie Grisham, portavoz de la Casa Blanca, precisó en un comunicado que durante las conversaciones “la discusión incluirá la transferencia forzada de tecnología, los derechos de protección intelectual, servicios, barreras no arancelarias y garantías”.
La comisión estadounidense en mesa de negociación está integrada por Robert Lighthizer, representante de Comercio Exterior, y Steven Mnuchin, secretario del Tesoro.
El diálogo se produce en medio de la cuenta regresiva para el 15 de octubre, cuando está previsto el aumento de los aranceles a importaciones chinas. Dichos impuestos pasaran de 25 al 30%, por valor de 250.000 millones de dólares.
Retaliación
El pasado 1 de septiembre tuvo lugar más reciente episodio de la guerra comercial que enfrenta a Washington y Pekín. En ese momento entró en vigor un incremento de 10 a 15% sobre bienes chinos.
Como represalia, Pekín puso en marcha gravámenes de entre 5 y el 10% a productos estadounidenses.
Trump advirtió que si es reelegido en las elecciones de 2020 tendrá una postura más firme aún a la hora de negociar un acuerdo comercial.
“Mientras tanto, la cadena de suministros del gigante asiático se desmoronará”, afirmó.
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