El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este viernes que ya hay preparativos para la firma de un acuerdo comercial con China tras haber hablado con su homólogo chino, Xi Jinping.
«Tuve una muy buena conversación con el presidente Xi, de China, sobre nuestro gigantesco acuerdo comercial. China ha empezado las compras a gran escala de productos agrícolas y más. La firma formal se está preparando», dijo el mandatario estadounidense en su cuenta de Twitter.
Trump reveló que, además, analizó con Xi otros asuntos: «También hablamos sobre Corea del Norte, donde estamos trabajando con China, y Hong Kong (¡progreso!)», tuiteó.
Tras casi 18 meses de guerra comercial y la consiguiente escalada de aranceles, Trump anunció hace una semana el cierre de la primera fase de un pacto con Pekín, que incluye el retiro parcial de los gravámenes y el aumento de las compras de China de productos estadounidenses.
El viceministro de Comercio, Wang Shouwen, confirmó, por su parte, que la primera fase del pacto aborda temas como la transferencia de tecnología, la propiedad intelectual, el crecimiento del comercio y el establecimiento de mecanismos para la resolución de disputas, entre otros.
Lo que implica
El acuerdo implica que se mantienen aranceles de Estados Unidos de 25% a importaciones de China valoradas en 250.000 millones de dólares, junto con unos gravámenes reducidos de 7,5% a importaciones adicionales valoradas en aproximadamente 120.000 millones de dólares.
La agencia oficial china Xinhua indicó que Washington se comprometió a retirar por etapas los gravámenes que ambas partes se han ido imponiendo durante la disputa.
Las negociaciones entre ambas partes han sufrido varios sobresaltos, con informaciones contradictorias y críticas veladas, desde que en octubre se anunció un principio de acuerdo.
Las tensiones comerciales entre las dos principales economías mundiales, que comenzaron el año pasado, han tenido profundas consecuencias.
En sus últimas previsiones de crecimiento mundial, publicadas en octubre, el Fondo Monetario Internacional rebajaba 3% sus proyecciones de crecimiento este año, dos décimas menos que en julio, pues se han visto lastradas por las dudas que ha generado esta disputa.