El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, extendió la suspensión de algunos visados de trabajo y green cards en el país norteamericano hasta el próximo mes de marzo, una decisión que justifica como un medio de preservar los trabajos para ciudadanos estadounidenses afectados por la pandemia del coronavirus.
A juicio de Trump permitir la entrada de trabajadores inmigrantes al país podría poner en riesgo de ser desplazados y en desventaja a los trabajadores de Estados Unidos durante la recuperación económica posterior al brote de covid-19, según un anuncio presidencial emitido en el último día de 2020.
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Así, las medidas impuestas en abril y junio que restringen significativamente la inmigración legal podrían permanecer por ahora, según Trump. Sin embargo, los límites impuestos ahora podrían ser eliminados cuando el presidente electo, Joe Biden, asuma la Casa Blanca a final del mes de enero.