Corea del Sur y Japón denunciaron que el lanzamiento norcoreano de un cohete espacial con un satélite de reconocimiento a bordo, que se estrelló en el mar Amarillo por un fallo técnico, supone una vulneración de las resoluciones de Naciones Unidas.
«Este lanzamiento, ya sea de un satélite o de un misil, viola las resoluciones de la ONU y por tanto no podemos aceptarlo», dijo hoy el ministro nipón de Defensa, Yasukazu Hamada, en declaraciones a los medios locales.
El ministro japonés señaló que este país «tomará medidas para estar preparado» ante un nuevo lanzamiento norcoreano de este tipo en los próximos días, después de que Pionyang indicara su intención de volver a intentar poner en órbita su satélite espía lo antes posible.
Lanzamiento viola resoluciones
El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur, en la misma línea, señaló que el lanzamiento norcoreano, haya tenido éxito o no, «ha sido una grave violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y una seria provocación que amenaza la paz y la seguridad en la península coreana y en la comunidad internacional».
Las autoridades surcoreanas «mantendrán una postura de coordinación con sus socios y aliados» mientras se continúan analizando la posibilidad de lanzamientos adicionales del Norte, según indicó el Consejo de Seguridad Nacional en un comunicado.
La agencia estatal norcoreana KCNA informó de que el satélite se lanzó en un cohete Chollima-1, un nuevo tipo de proyectil, a las 6.27 hora local de este miércoles (21.27 GMT del martes) desde la estación de lanzamientos espaciales de Sohae (noroeste del país).
Este medio indicó que tras la separación de la primera fase del cohete «el encendido del motor de la segunda fue anormal, por lo que perdió propulsión y se estrelló en el mar del Oeste» (nombre que recibe el mar Amarillo en las dos Coreas).
Un portavoz de la Administración Nacional de Desarrollo Aeroespacial (NADA) norcoreana citado por KCNA indicó que se investigarán «los fallos en detalle» y que se «idearán urgentemente medidas científicas y tecnológicas para solucionarlas y llevar a cabo un segundo lanzamiento lo antes posible tras varias pruebas parciales».
Alertas antimisiles
El lanzamiento norcoreano causó la activación de las alertas antimisiles en torno a las 6.30 hora local en Seúl y en la prefectura japonesa de Okinawa (sudoeste), por donde habría sobrevolado el proyectil, instando a la posible evacuación ciudadana, aunque esta advertencia se retiró posteriormente.
Pionyang había confirmado en la víspera que lanzaría en los próximos días desde Sohae un cohete espacial cargado con un satélite de reconocimiento militar, en línea con sus objetivos de modernización armamentística.
Seúl y Tokio, que convocaron reuniones de urgencia para analizar la situación, consideran que el lanzamiento de hoy, al igual que otros anteriores del mismo tipo llevados a cabo por el régimen norcoreano, sería un ensayo encubierto para testar tecnología de misiles balísticos, algo que castigan las sanciones de la ONU que pesan sobre Pionyang.