El tiroteo en un supermercado kosher en Nueva Jersey el 10 de diciembre se planificó durante meses y se debió a la postura de los pistoleros en contra del semitismo y la policía, indicó este lunes el FBI.
Un mes después del tiroteo que terminó con la muerte de seis víctimas, incluido el policía Joseph Seals, las autoridades ofrecieron nuevos detalles del incidente. En este también murieron los pistoleros David Anderson y su compañera Francine Graham.
Las autoridades dijeron que existe prueba de que los sospechosos planificaron durante meses el ataque. Vigilaron el supermercado en al menos dos ocasiones y en una de ellas entraron al establecimiento, señalaron medios locales.
Igualmente, el fiscal federal Craig Carpenito indicó que los pistoleros compraron cinco armas en Ohio en marzo de 2018 y que practicaron en un campo de tiro en ese estado en diciembre.
También que cargaron con un gran alijo de armas y explosivos en una camioneta en la que vivían y viajaban. Agregó que hicieron una búsqueda de otras localidades judías en Internet, pero se desconoce por qué eligieron el supermercado como blanco.
«Él se refería a la comunidad judía como israelitas malvados que aman la oscuridad para cubrir su maldad. Pudimos recuperar los teléfonos de ambos y encontramos búsquedas en Google de un centro comunitario judío en Bayona», explicó el fiscal en la rueda de prensa.
Tiroteo
Durante al menos una hora sonaron los intercambios de disparos en la comunidad de Greenville de Nueva Jersey, cerca de Nueva York, una situación que llevó al cierre de una docena de escuelas y calles y a desalojar negocios de la zona.
Decenas de policías de siete municipios de Nueva Jersey, así como de Nueva York, el FBI y el Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos respondieron al incidente.
El tiroteo culminó con la muerte del ecuatoriano Douglas Miguel Rodríguez Barzola, de 49 años de edad, y Moshe Deutsch, de 24 años, empleados del supermercado. Además, murió Mindel Ferecz, de 31 años, codueña del establecimiento.
Las autoridades mostraron una lista de artículos hallados en la camioneta que Graham conducía el día del tiroteo en el supermercado.
Una lista de artículos tácticos, notas de cómo disparar rifles a larga distancia, un potente dispositivo explosivo y material para construir otro estaban en el vehículo.
El agente Gregory W. Ehrie, a cargo de la oficina del FBI en Newark, aseguró que de haber explosionado el artefacto, habría herido y matado gente hasta cinco campos de fútbol de distancia.
Sospechosos de otro ataque
Entre las cosas que hallaron, además los investigadores, había una Biblia con sangre de la víctima de otro tiroteo en el que supuestamente están involucrados.
«Eso no fue más que un acto cobarde, perverso, sin sentido de antisemitismo, de odio hacia no solo la comunidad judía, sino también los agentes del orden. Anderson y Graham atacaron a las víctimas judías y a la policía. Ahora sabemos que planearon mayores actos contra ambas comunidades», dijo Carpenito.
Además de ser sospechosos del asesinato de un taxista el pasado 7 de diciembre, Anderson y Graham también son sospechosos de disparar contra un vehículo que era conducido por un hombre jasídico.
El incidente ocurrió cerca del aeropuerto de Newark, en Nueva Jersey, de acuerdo con los datos ofrecidos este lunes.
Indicaron, además, que la víctima en este caso no se percató de que era el blanco de ese ataque hasta un día después del tiroteo en el supermercado, luego de que el móvil de uno de los pistoleros lo ubicara en el lugar el día de los disparos.
Sobre el policía Seal, casado y quien tenía cinco hijos, indicaron que este estaba en el cementerio para encontrarse con un informante. En el lugar reconoció la camioneta robada y fue a investigar, cuando resultó con un tiro en la cabeza que le costó la vida.