El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, aseguró que su país seguirá reduciendo sus emisiones de gases de efecto invernadero pese a su retirada del Acuerdo de París sobre cambio climático, en un intento de rebajar las críticas a la decisión tomada por el presidente Donald Trump.
“Creo que es importante que todo el mundo reconozca que Estados Unidos tiene un historial fantástico en lo que se refiere a la reducción de nuestras emisiones de gases de efecto invernadero”, dijo Tillerson en declaraciones a los periodistas antes de reunirse con el ministro de Exteriores de Brasil, Aloysio Nunes Ferreira.
“Es algo de lo que creo que podemos estar orgullosos y que se hizo sin que estuviera (aún en vigor) el Acuerdo de París. No creo que vayamos a cambiar nuestros esfuerzos para reducir esas emisiones en el futuro, así que confío en que la gente pueda poner las cosas en perspectiva”, añadió.
Tillerson fue uno de los principales defensores de permanecer en el Acuerdo de París durante el debate interno en la Casa Blanca sobre qué hacer con el pacto contra el calentamiento global, firmado a finales de 2015 por casi 200 países.
Miembros del gabinete y asesores del presidente de Estados Unidos rechazaron aclarar qué piensa el mandatario acerca del cambio climático, un fenómeno que llegó a negar en el pasado.
En la rueda de prensa diaria de la Casa Blanca, el jefe de la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos, Scott Pruitt, conocido por su escepticismo sobre el calentamiento global, defendió con vehemencia la “muy valiente” decisión de Trump de sacar al país del Acuerdo climático de París, medida que fue anunciada el jueves.
Pruitt enfatizó que, como país, Estados Unidos no tiene que disculparse por nada ni ante nadie por querer dejar el Acuerdo de París. A juicio del jefe de la EPA, el pacto climático es solo “un montón de palabras” que representan “poco beneficio” para el medioambiente a escala mundial y, a la vez, sitúan en una posición de desventaja a Estados Unidos y su economía.
Otros miembros del gabinete, entre ellos la secretaria de Educación, Betsy DeVos, también eludieron comentar los efectos de la actividad humana en el calentamiento global y qué opina Trump, al igual que asesores como la consejera presidencial Kellyanne Conway o el economista jefe de la Casa Blanca, Gary Cohn.
Nuevos líderes. China y la Unión Europea se reafirmaron como abanderadas de la lucha contra el cambio climático, en un contexto de decepción mundial por la decisión de Washington de retirarse del Acuerdo de París, aunque no lograron plasmar esta intención en una declaración conjunta.
“Hoy en día intensificamos nuestra cooperación sobre el cambio climático con China, una lucha que continuará con o sin Estados Unidos», afirmó el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, al término de una cumbre en Bruselas junto al primer ministro de China, Li Keqiang.