La tasa de mortalidad del covid-19 en Wuhan, China, alcanzó 1,4% hasta el pasado mes de febrero. Un porcentaje «sustancialmente más bajo» de lo cifrado hasta ahora, de acuerdo con un artículo publicado este jueves en Nature Medicine.
El 29 de febrero de 2020 de los 79.394 casos confirmados en toda China continental 48.557 eran de Wuhan y de las 2.838 muertes que se registraron en todo el país asiático, 2.169 ocurrieron en Wuhan.
Una prioridad clave de la salud pública durante la aparición de un nuevo patógeno es calcular la gravedad clínica, una información que afecta a la adopción de decisiones sobre la clasificación de los enfermos y su diagnóstico. Especialmente en los lugares en los que no hay acceso fácil a las pruebas de laboratorio o en los hospitales que han superado su capacidad.
El estudio, liderado por el investigador Joseph Wu de la Universidad de Hong Kong, revisa y coteja los modelos de dinámica de transmisión de enfermedades publicados con datos oficiales y de información de dominio público para determinar la gravedad clínica del coronavirus. También de ayudar a orientar la adopción de decisiones clínicas y de salud pública de esta pandemia, que sigue propagándose por el mundo.
Los autores determinaron que al 29 de febrero de 2020, el riesgo de mortalidad por casos sintomáticos -la probabilidad de morir después de desarrollar síntomas- de covid-19 en Wuhan era de 1,4%.
En comparación con las personas de 30 años a 59 años de edad, los menores de 30 años y los mayores de 59 años tenían 0,6 y 5,1 veces más probabilidades de morir después de desarrollar síntomas, respectivamente, según el estudio.
Los autores también encontraron que el riesgo de infección sintomática aumentaba con la edad, por ejemplo, alrededor de 4% anual entre los adultos de 30 años a 60 años de edad.
Estas conclusiones sugieren que el riesgo de letalidad de los casos sintomáticos puede ser «sustancialmente menor» de lo calculado hasta ahora, sobre todo en lo que se denomina «letalidad bruta», que mide la proporción de muertes con respecto al número total de casos.
Para hacer este estudio se cotejaron datos epidemiológicos de las fuentes de datos de acceso público (artículos de noticias, comunicados de prensa e informes publicados por organismos de salud pública), precisan los autores de la investigación.