Serguéi Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, visitará Cuba, México y Venezuela, en una agenda para estrechar lazos bilaterales con estos tres países.
El jefe de la diplomacia rusa aterrizará en Cuba el próximo miércoles donde se reunirá con su homólogo, Bruno Rodríguez.
Asimismo, está previsto que el día 6 llegue a México para conversar con el canciller, Marcelo Ebrard, según la información de la portavoz de la cancillería María Zajárova
Ambos hablarán sobre «la intensificación del diálogo político, la diversificación de las relaciones comerciales, económicas y de inversión, la expansión de los intercambios culturales y humanitarios y en la base legal de la cooperación bilateral», añadió Zajárova.
Además abordarán la relación entre Rusia e instituciones regionales como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
La portavoz recordó que México y Rusia celebran en 2020 130 años de relaciones bilaterales, lo que contribuirá a reforzar la cooperación mutua.
Agenda en Venezuela
Lavrov llegará a Venezuela el 7 de febrero. Ahí se reunirá con Nicolás Maduro, la vicepresidente del régimen, Delcy Rodríguez, y el canciller chavista, Jorge Arreaza.
«Intercambiarán puntos de vista sobre la situación en torno a Venezuela y las perspectivas de una solución política», afirmó Zajárova.
Rusia es actualmente el principal socio del régimen de Maduro, junto con China, Bolivia, Cuba, Nicaragua y Turquía.
Acuerdos Venezuela-Rusia
Rusia y Venezuela suscribieron en los últimos 18 años alrededor de 260 acuerdos de cooperación en materia minera, petrolera, económica, energética, alimentaria y militar.
«Planeamos abordar la agenda bilateral y los pasos prácticos para incrementar la cooperación entre los dos países en los campos de la energía, la industria minera, el transporte, la agricultura, las medicinas, farmacéuticas y la cooperación técnico-militar», señaló la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia.
La portavoz rusa recordó que ambos países celebran el 75 aniversario del establecimiento de sus relaciones diplomáticas y que el siglo XXI alcanzó el «nivel de asociación estratégica».