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Salvador Ramos: de adolescente perturbado a autor de masacre en escuela

por Avatar AFP

Víctima de bullying en la escuela, con dificultades en el hogar e historial de autolesiones, el adolescente Salvador Ramos, que mató a tiros a 19 niños en una escuela de Uvalde, Texas, tenía antecedentes problemáticos. Similares a los de otros autores de masacres escolares anteriores.

Ramos, de 18 años de edad, fue muerto por un agente de la Patrulla Fronteriza durante su ataque a una escuela primaria en Uvalde, Texas. Era un ciudadano estadounidense que vivía con su abuela.

Un día después del ataque a la Escuela Primaria Robb, en la que también mató a dos maestras, se empezaron a conocer detalles del joven que llevó a cabo uno de los tiroteos escolares más mortíferos de la nación: había abandonado los estudios secundarios y no tenía antecedentes penales.

Salvador Ramos fue un adolescente acosado

Una prima del adolescente, Mia, le dijo a The Washington Post que cuando Ramos era más pequeño se burlaban de él por un impedimento del habla. Ese problema lo hacía tartamudear y cecear. Por esa razón le decía a su abuela que quería dejar de asistir a clases.

Stephen García, amigo de Ramos, confirmó que el bullying era un problema. «Lo acosaban mucho, mucha gente lo hostigaba», declaró García al Post.

Su cuenta de la red Instagram, eliminada ahora, mostraba fotos de un joven con el pelo hasta los hombros y los ojos cerrados. Su perfil también incluía imágenes de dos rifles semiautomáticos de asalto. Así como un cargador de pistolas de plástico.

Peleas con su madre

También hubo reportes de peleas entre Ramos y su madre, quien consumía drogas, según vecinos. Los enfrentamientos entre madre e hijo se convirtieron en un problema grave al punto de que acudiera la policía, dijeron.

Otro amigo, Santos Valdez, recordó que Ramos una vez se cortó la cara «solo por diversión».

El acoso y los problemas de salud mental son denominadores comunes en los trágicamente frecuentes y mortales tiroteos en centros educativos de Estados Unidos.

Hace más de 20 años, dos adolescentes que sufrieron bullying de parte de otros estudiantes mataron a 13 personas y se quitaron la vida en su escuela secundaria en Columbine, Colorado.

Conducta de Ramos, similar a otros atacantes

En 2007, un estudiante con problemas mentales mató a 32 personas en un tiroteo en el Instituto Politécnico del estado de Virginia. El atacante, que también se suicidó, se refirió a los atacantes de Columbine como «mártires» en un video antes del tiroteo.

También presentó trastornos mentales el autor del tiroteo en la escuela primaria Sandy Hook, en Connecticut. Este en 2012 mató a 26 personas, incluidos 20 niños. Así como el estudiante expulsado por motivos disciplinarios y que luego mató a 17 personas en una secundaria de Parkland, Florida, en 2018.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, desvió el miércoles una pregunta sobre si se necesitaban reformas en las leyes sobre armas. En cambio apuntó a la atención de la salud mental.

«Como estado, nosotros como sociedad, necesitamos hacer un mejor trabajo con la salud mental», dijo.

Leyes contra uso de armas

La Asociación Nacional del Rifle (NRA) un poderoso grupo de presión, fundamental para frustrar los esfuerzos por hacer más estrictas las leyes de armas en Estados Unidos, tomó una táctica similar y dijo que el tiroteo fue obra de un «criminal solitario y trastornado».

La primera víctima de Ramos fue su abuela, a quien disparó en la cara. La mujer de 66 años de edad pudo llamar a la policía y fue trasladada en avión en estado crítico a un hospital en las cercanías de San Antonio.

El pistolero, que comunicó en Facebook su intención de atacar una escuela primaria, huyó de la casa de su abuela en un vehículo, vistiendo un chaleco táctico y armado con un rifle.

Luego chocó cerca de una zanja afuera de la Escuela Primaria Robb, salió y se dirigió a la escuela, donde policías intentaron detenerlo, pero no lo lograron.

Ramos se atrincheró en dos aulas contiguas y le disparó a los estudiantes y a los maestros adentro, dijeron las autoridades.

Pete Arredondo, el jefe de policía del distrito escolar de Uvalde a cargo de la investigación, señaló que Ramos actuó solo.