El rey emérito español Juan Carlos I abandonó la localidad gallega de Sanxenxo, Pontevedra, norte de España, este martes «muy contento» y con la intención de volver «pronto», según explicó antes de dirigirse al aeropuerto de la ciudad de Vigo, tras participar en las regatas celebradas durante el fin de semana en la zona.
Se trata de la tercera vez que Juan Carlos I visita España desde que decidió establecer su residencia en Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos, en agosto de 2020.
Llegó el pasado miércoles en un vuelo privado desde Abu Dabi y su presencia atrajo a numerosos medios de comunicación al aeropuerto y a algunos curiosos que no quisieron perderse el aterrizaje de la aeronave en las inmediaciones del recinto.
Tal como hizo en otras ocasiones se alojó en la casa de su amigo Pedro Campos y lo acompañó ocasionalmente su hija la infanta Elena.
Al salir de la vivienda de su amigo, se detuvo un instante en el coche y dijo a los medios que se iba «muy contento y feliz».
«Gracias por haberme ayudado a estar y a estar tan bien como he estado», aseguró el anterior jefe del Estado.
Sobre cuándo volverá a Sanxenxo, compartió que será «pronto», sin concretar la próxima cita.