Un grupo de 35 ONG presentes en Siria alertaron este martes de que los rescatistas solo pudieron salvar vidas en 5% de las áreas opositoras golpeadas por los terremotos debido a la falta de recursos y llamaron a tomar medidas de forma inmediata para garantizar ayuda a la población del país árabe.
«Como no se envió equipamiento adicional ni capacidad al noroeste de Siria, los rescatistas locales solo pudieron buscar en 5% de las áreas afectadas. Los potenciales supervivientes atrapados bajo los escombros en el restante 95% no fueron rescatados a tiempo», afirmaron las organizaciones en un comunicado.
Las aisladas regiones opositoras del noroeste del país, las más afectadas por la tragedia, no recibieron su primera ayuda humanitaria hasta pasados cuatro días del sismo inicial, que también afectó en gran medida a zonas en manos del gobierno del presidente sirio, Bachar al Asad.
El grupo, que incluye ONG locales e internacionales operativas en distintas partes de Siria, consideró que la comunidad internacional falló a la población al no actuar con la suficiente rapidez para apoyar el rescate de supervivientes en las áreas opositoras, donde los socorristas no contaron con los recursos necesarios.
«ONG internacionales operativas en Siria llaman a un aumento urgente y acciones inmediatas para garantizar ayuda humanitaria a la población afectada por los terremotos en Siria; la respuesta humanitaria debe ajustarse a la envergadura del desastre», dijeron en su nota.
Transcurrida más de una semana de la catástrofe, las 35 organizaciones expresaron su «extrema preocupación» con los actuales niveles de asistencia a los afectados, que «ni si quiera se aproxima a lo que se necesita ante la devastación».
Según se dio a conocer este martes, el gobierno del presidente sirio, Bachar al Asad, aceptó abrir temporalmente dos cruces fronterizos adicionales entre Turquía y la zona del noroeste del país bajo control rebelde para facilitar el suministro de ayuda humanitaria tras el reciente terremoto.
Hasta el momento, las Naciones Unidas solo estaban autorizadas a ingresar suministros a esa región de forma directa a través del cruce de Bab al Hawa, también en la divisoria turca, lo que habría contribuido a las demoras en la respuesta internacional a la tragedia.