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Reprimir a disidentes no resolverá la agitación en calles

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El alto comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humnos, Zeid Ra’ad al Hussein, afirmó que la vía por la que ha optado el gobierno de Venezuela de reprimir las voces disidentes no resolverá la agitación en las calles o las razones de las protestas.

Consideró que los elementos más alarmantes de la situación que atraviesa Venezuela son el aumento de la violencia, las acciones de grupos armados progubernamentales y la extendida falta de confianza en el gobierno y el poder judicial.

“En nuestra opinión, las amenazas de desvincularse de la Organización de Estados Americanos tampoco son una estrategia para recuperar la estabilidad y la paz”, declaró Zeid en una rueda de prensa en la que pasó revista a las situaciones más preocupantes de derechos humanos en el mundo.

El organismo que dirige Zeid no tiene ningún acceso a Venezuela a pesar de que varias veces ha solicitado al gobierno que emita los visados correspondientes a sus expertos para que evalúen directamente la situación de derechos humanos en el país.

La última petición en ese sentido fue formulada el pasado octubre, sin ningún resultado y Zeid declinó comentar si en las últimas semanas se ha insistido ante el Gobierno del presidente Nicolás Maduro para obtener este acceso o si desde Caracas simplemente se les ignora.

Zeid explicó que desde que asumió su mandato ha transmitido al gobierno venezolano su deseo de visitar el país. Sobre la posibilidad de que su oficina ofrezca una mediación en la actual crisis que sufre Venezuela, el alto comisionado dijo que estaría a favor si el gobierno estuviese de acuerdo para ello.

La OEA ha intentado en el pasado ejercer ese rol, pero su relación con el Gobierno de Nicolás Maduro se degradó en los últimos meses.

Las protestas en Venezuela cumplen hoy un mes, con un saldo de 30 personas asesinadas, medio millar de heridos y cientos de detenidos. Tanto la oposición como los sectores afines al gobierno han pedido a sus respectivos simpatizantes que salgan a las calles para participar en nuevas marchas.