Los quebequenses que deseen comer en un restaurante, ejercitarse en el gimnasio o asistir a un festival deberán presentar un pasaporte sanitario a partir del 1 de septiembre. Así lo anunció el ministro de Salud de esta provincia canadiense, Christian Dubé.
«Nuestro objetivo con el pasaporte es no volver a un confinamiento generalizado. Y al mismo tiempo evitar saturar nuestros hospitales», indicó Dubé durante una conferencia de prensa.
Quebec es la primera provincia de Canadá que implementa el pasaporte sanitario, obligatorio para quien quiera «acceder a eventos públicos concurridos y actividades con altas tasas de contacto y socialización».
El gobierno de la provincia debe precisar en las próximas semanas qué lugares públicos específicamente tendrán la obligación de exigir el pasaporte sanitario en papel o en un formato electrónico disponible por medio de una aplicación gratuita.