Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, felicitó a Juan Guaidó por su reelección como presidente encargado de Venezuela y de la Asamblea Nacional.
El secretario condenó los intentos de Nicolás Maduro por negar la voluntad del Parlamento.
En un comunicado, Pompeo recordó: «Durante meses, funcionarios corruptos del régimen han llevado a cabo una campaña ilegítima, violenta y despreciable de detenciones, intimidación y sobornos con el objeto de destruir la última institución democrática que queda en Venezuela, la Asamblea Nacional».
Pompeo aseguró que cuando el régimen de Maduro entendió que la campaña de soborno no consiguió el apoyo suficiente en la Asamblea Nacional, recurrió a la fuerza para negar el acceso a Juan Guaidó y sus partidarios al Palacio Federal Legislativo.
La imposición de Luis Parra
Mike Pompeo calificó de farsa el nombramiento de Luis Parra como presidente de la Asamblea Nacional, en un breve debate sin Guaidó ni el quorum requerido.
«Maduro sigue mostrando indiferencia por la Constitución y la voluntad del pueblo venezolano», agregó Pompeo en la nota.
Precisó que Estados Unidos y otros 57 países continúan considerando a Guaidó como el líder legítimo de la Asamblea Nacional y, por ende, el presidente interino legítimo de Venezuela.
«Guaidó personifica para Washington la lucha del pueblo venezolano por recuperar la prosperidad y la democracia que el país tuvo alguna vez», dijo.
Reacciones
Aliados internacionales de Guaidó condenaron y calificaron de golpe y farsa la elección por parte del chavismo de un nuevo presidente de la Asamblea Nacional.
Horas después de la elección de Parra, Guaidó participó en una sesión improvisada en El Nacional donde se aprobó su reelección como presidente del Parlamento.
Este cargo le permitió su proclamación como presidente interino de Venezuela con base en una interpretación de varios artículos de la Constitución.
Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos, condenó la acción de usurpación contra la legitimidad constitucional y las mayorías del Parlamento.
El Grupo de Lima rechazó también la elección de Parra y al régimen dictatorial por impedir a los diputados acceder libremente al hemiciclo.