Los altos responsables de 19 países, reunidos en Viena en la cumbre multilateral sobre Siria, acordaron que bajo los auspicios de la Organización de Naciones Unidas se debe explorar las modalidades de un alto el fuego, mientras que se prosiga, en simultáneo, un renovado proceso político. En un comunicado final, emitido tras ocho horas de conversaciones, los principales aliados de la oposición y del gobierno sirio destacaron las discusiones sobre el conflicto, que lleva más de cuatro años y que ha causado más de 250.000 muertes.El acuerdo llega a la conclusión de que es fundamental la unidad, la independencia, la integridad territorial y su carácter secular; las instituciones del Estado permanecerán intactas; los derechos de todos los sirios, sea cual sea su fe religiosa o pertenencia étnica, deben ser protegidos: es imperioso acelerar todos los esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra, se garantizará el acceso humanitario, los participantes aumentarán su apoyo a las personas desplazadas en el país, a los refugiados y a los países que los acogen; derrotar el Estado Islámico, que la ONU convoque a representantes del gobierno y la oposición siria a iniciar un proceso político y celebrar elecciones libres y justas. Estados Unidos desplegará en Siria cerca de 50 miembros de fuerzas especiales, una decisión que supone un giro en la política del presidente Barack Obama.
