Este miércoles fue presentado ante un juez de Bogotá el ciudadano venezolano capturado por el asesinato del patrullero Edwin Caro Gómez.
El policía murió por un impacto de bala en el rostro cuando realizaba un procedimiento de requisa a dos hombres sospechosos, que se movilizaban en una moto.
El hombre imputado fue identificado como Wilkerson Slyke Hernández Sánchez, quien acompañaba a otro hombre que no ha sido identificado aún y se presume que también es venezolano.
Persecución y captura
La captura de Hernández ocurrió minutos después del asesinato del patrullero Caro, luego de una persecución por parte de un policía y un escolta.
De acuerdo con el informe de la policía y el relato del compañero de Caro, el ciudadano Wilkerson Hernández fue quien presuntamente disparó contra el patrullero.
Según la fiscal del caso, el agente Jhonatan Andrés Baquero efectuó la aprehensión. Hernández fue capturado en flagrancia por el delito de homicidio agravado.
El uniformado forma parte de un esquema de seguridad de un funcionario de la Presidencia de la República que en ese momento transitaba por el sector de El Nogal y atendió la solicitud de apoyo formulada por el compañero de Caro.
En la narración de los hechos, la fiscal del caso contó que en la persecución Baquero se encontró con ciudadanos que le decían que el hombre iba armado. Baquero le gritaba que se detuviera.
Finalmente, el uniformado le dio alcance y efectuó el procedimiento de captura. Luego lo trasladó a pie, pero en el recorrido ciudadanos se acercaron y empezaron a golpear al capturado con cascos, puños y patadas.
Material probatorio
Entre el material probatorio se encuentran la motocicleta de los dos hombres y el arma que portaba Hernández, aunque este la botó entre unos arbustos cuando huía. También se encuentra un armamento del hombre que murió en el lugar de los hechos.
Asimismo, se consignaron los testimonios del policía que realizó la captura y del agente José David Carvajalino, compañero de Caro, así como el testimonio de una ciudadana de la zona.
Venezolano detenido fue llevado a un hospital
El venezolano imputado fue trasladado a una clínica para ser atendido por las heridas que le causaron miembros de la comunidad con golpes de cascos y puños.
La funcionaria judicial indicó también que el agente Baquero protegió al ciudadano venezolano de la comunidad enfurecida, y se lo entregó a los policías que habían solicitado apoyo por radio.
En los hechos, de acuerdo con la narración, el patrullero José David Carvajalino, quien acompañaba a Caro, presentaba también heridas que sufrió en medio del intercambio de disparos.
El agente Baquero, al llegar al lugar de los hechos, se encontró con Carvajalino, quien reconoció a Hernández como uno de los sospechosos a los que estaban requisando y que tenían dos armas en el morral de domicilios.
También se señaló que Hernández presenta huellas de heridas sufridas en el pasado. Sin embargo, no se precisó con qué tipo de armas habrían sido causadas.
Suspensión de la audiencia
Por solicitud de la procuradora delegada para el caso, Beatriz Jiménez, el juez 79 suspendió la audiencia.
Jiménez dijo que, de acuerdo con el informe, la captura fue a las 3:15 y que esa hora corresponde con la distancia que habrían recorrido. Indicó que están dentro del turno y está satisfecha con la línea de tiempo de los hechos.
De lo que se puede inferir que sí se pusieron en conocimiento del capturado sus derechos. También indica que Hernández no dio información sobre familiares.
Asimismo, señaló que el Estado debe garantizarle los derechos al capturado con el fin de que no sea maltratado. Y pidió investigar el origen de las lesiones que presenta.
No obstante, aclara que al respecto están las versiones de dos agentes y de algunos ciudadanos, las cuales coinciden, y les da crédito a estas.
«No se presentó, durante la captura, vulneración alguna a la persona», afirmó Jiménez, quien solicitó al juez proceder a la legalización de la captura de Hernández.
Manifiesta ser maltratado
El abogado Víctor Chaparro, asignado como defensor, señaló al juez que el capturado le manifestó que en el cruce de disparos se bajó de la moto y empezó a correr a lo largo de cuadra y media, donde fue interceptado por un militar, dos escoltas y un policía.
Él manifiesta que estas personas lo maltrataron y que la médico que lo atendió también lo regañó y lo ultrajó.
Ante esto, el abogado defensor le pidió al juez tener en cuenta este aspecto al momento de referirse a la captura y se declare ilegal la captura por haber sido objeto de maltrato.
El juez del caso desestimó las presuntas agresiones que habría sufrido el capturado. Indicó que el procedimiento de captura se ajusta a los mandatos constitucionales y no se le violó ningún derecho al ciudadano venezolano Wilkerson Slyke Hernández Sánchez.
«Declarar la legalidad de la captura por el delito de homicidio agravado», agregó el juez que legaliza la captura.
También declaró que procede la incautación con fines de decomiso de la motocicleta, donde eran transportadas las armas que fueron utilizadas en el asesinato del patrullero Edwin Caro Gómez.
Al finalizar la audiencia, la fiscal del caso le imputó cargos a Hernández Sánchez por homicidio agravado consumado, tentativa de homicidio -en el caso del patrullero Carvajalino- y porte ilegal de armas.
Posible pena
El delito de homicidio agravado le daría a Hernández una pena de 400 a 600 meses de prisión en caso de ser condenado por un juez.
Mientras se cumple el juicio, el venezolano Wilkerson Slyke Hernández Sánchez deberá permanecer en establecimiento carcelario.
Hernández no aceptó los cargos y dijo que él no le disparó al patrullero Caro, sino que fue su acompañante, cuya identidad desconocen hasta ahora las autoridades. También pidió que fuera trasladado a Venezuela.
El juez suspendió la audiencia y convocó para este viernes en la tarde la audiencia de medida de aseguramiento contra el ciudadano venezolano Wilkerson Slyke Hernández Sánchez.