Paraguay se prepara para la llegada de una de las peores epidemias de dengue de la década. El Ministerio de Salud Pública alertó este miércoles sobre las altas posibilidades de que se alcancen unas cifras de infectados similares a las de los años 2013 y 2016, las peores de los últimos 10 años.
Ante esta situación, las autoridades activaron un plan preventivo para la adquisición de material médico y la formación de los profesionales sanitarios. Asimismo, realizar estrategias como la eliminación de criaderos de mosquito en los vertederos.
“Es muy probable que experimentemos una gran epidemia de casos este verano, concentrada en el área metropolitana”, advirtió el doctor Guillermo Sequera, director general de Vigilancia de la Salud.
La cartera de Salud Pública advierte de la previsible llegada de una epidemia con la entrada de la temporada de lluvias estivales. A pesar, de que a lo largo de 2019 Paraguay solo ha reportado 9.600 casos de personas infectadas por el virus.
“Estamos conscientes de que vamos a tener una epidemia, vamos a tener muchos casos de dengue. El principal objetivo desde el Ministerio de Salud es que la gente no muera”, explicó Sequera.
La detección de los criaderos del mosquito “aedes aegypti”, transmisor del dengue, el zika y el chikunguña, es una de las fases más importantes de prevención para evitar que se extienda la enfermedad entre la población.
“Esta práctica puede frenar o retrasar el impacto de la epidemia”, aseguró el director general de Vigilancia.
El mosquito pone sus larvas en cúmulos de agua, en recipientes del entorno urbano y en los vertederos de las ciudades.
Más de dos millones de casos
Paraguay convocó a principios de septiembre a la mesa interinstitucional de prevención del dengue, un organismo en el que participan miembros de varios ministerios, gobiernos locales, la Policía Nacional o la Armada para activar un plan de contingencia.
La medida se tomó cuando la Organización Panamericana de la Salud (OPS) decretó la alerta epidemiológica por dengue en Latinoamérica y el Caribe. Esto, después de que la región registrara más de dos millones de casos de infectados por el virus.
El último reporte epidemiológico de la OPS, correspondiente a septiembre, elevó la cifra de afectados en la región en 2019 hasta las 2.384.029 personas. De todas estos enfermos, fallecieron 949.
Brasil, Nicaragua, Colombia, Honduras y México son algunos de los países que han registrado un mayor número de casos en Latinoamérica y el Caribe.