Luis Alberto Castiglioni, canciller de Paraguay, afirmó este domingo que el creciente reconocimiento internacional a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela «está creando las condiciones para que en poco tiempo el régimen» de Nicolás Maduro »pueda caer».
El titular de Exteriores hizo esas declaraciones a los medios a su llegada al aeropuerto Silvio Pettirossi de Asunción, procedente de Cúcuta (Colombia), donde acompañó al presidente, Mario Abdo Benítez, quien acudió a participar de la entrega simbólica de ayuda humanitaria a Venezuela.
Allí, Abdo Benítez acudió al concierto Venezuela Aid Live organizado para recaudar dinero para medicamentos para Venezuela, y dio partida a los camiones con la ayuda humanitaria hacia los pasos fronterizos junto a Guaidó, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, y los mandatarios de Colombia, Iván Duque, y de Chile, Sebastián Piñera.
La ayuda humanitaria fue solicitada por Guaidó, quien se juramentó en enero pasado como presidente encargado de Venezuela al considerar a Maduro un «usurpador» y fue reconocido por unas 50 naciones, entre ellas Brasil y Estados Unidos.
Castiglioni aseguró que Maduro »está contra las cuerdas porque la comunidad internacional está en contra», y que le mantiene «acorralado», una situación «peligrosa» ya que, a su juicio, puede desencadenar «acciones desesperadas» del mandatario venezolano.
No obstante, se mostró confiado en que la presión internacional «está creando las condiciones para que en poco tiempo el régimen pueda caer y pueda venir un nuevo estadio de libertad y democracia».
El ministro dijo que Guaidó «reconoció el protagonismo de Paraguay» como país que «ha liderado» la oposición a Maduro en la región con su ruptura inmediata de las relaciones diplomáticas con Venezuela el pasado 10 de enero, tras el juramento de Maduro para su segundo mandato, que Paraguay considera «ilegítimo».
Añadió que Juan Guaidó «valoró» que Paraguay fuese uno de los primeros países en reconocerle como presidente encargado.
En ese sentido, Castiglioni señaló que su país «ha sido protagonista de un evento histórico», en el que «todo el mundo ha presenciado el compromiso de esta región del mundo con el imperio del Estado de derecho, de la protección a los derechos humanos y de la vigencia de las libertades públicas».
Indicó que la presencia de Abdo Benítez en Cúcuta fue en «representación» de la «solidaridad» del pueblo paraguayo con el venezolano, y advirtió de que «vamos a volver a estar en esa parte del mundo, pero ya no sólo en el lado colombiano. Vamos a estar al otro lado de la frontera para celebrar la vuelta de la libertad y la democracia».
El titular de Exteriores también reiteró que la «postura» de Paraguay es que «sea el pueblo venezolano el protagonista de su liberación», porque «respetamos el derecho de la libre autodeterminación de los pueblos y el principio de la no intervención en los asuntos extraños», en referencia a una posible intervención militar estadounidense en Venezuela.
El intento de ingresar a Venezuela la ayuda humanitaria desde Colombia terminó este sábado en violentos enfrentamientos de la multitud que acompañaba a los camiones con la fuerza pública en los pasos fronterizos, que dejaron al menos 285 heridos.
Además, tres camiones que transportaban esa ayuda fueron quemados en el lado venezolano, lo que obligó al gobierno colombiano a ordenar el regreso de los vehículos, en una jornada en la que también se produjeron 60 deserciones de militares venezolanos, que se entregaron a las autoridades colombianas.