El papa Francisco designó un equipo de religiosos para coordinar la cumbre mundial sobre el abuso sexual de menores en la Iglesia que se celebrará en febrero en el Vaticano.
«El papa Francisco quiere que los líderes de la iglesia comprendan a fondo el impacto devastador sobre las víctimas que significa el abuso sexual por parte del clero», explicó Greg Burke, portavoz de la Santa Sede.
Los jefes de 113 conferencias episcopales del mundo fueron convocados por el pontífice argentino para una cumbre extraordinaria que pretende prevenir los abusos sexuales por parte del clero.
El evento, el primero de ese tipo, se llevará a cabo del 21 al 24 de febrero del año 2019 y quiere ser una respuesta concreta al escándalo de la pedofilia dentro de la iglesia y su encubrimiento.
«La reunión es ante todo con los obispos, porque ellos tienen la gran responsabilidad de lidiar con ese grave problema. Han sido invitados hombres y mujeres expertos en el campo del abuso para que con sus contribuciones ayuden a establecer lo que hay que hacer para garantizar transparencia y responsabilidad», explicó Burke.