![[VIDEO] Padre inventó un juego para que su hija no se asuste con las bombas en Siria](https://cdn.bitlysdowssl-aws.com/wp-content/uploads/2020/02/Archivo.jpeg)
El video de una niña de cuatro años de edad que ríe junto con su padre mostró la situación de los ciudadanos en Siria, en medio de la guerra que los mantiene en un ambiente marcado por el sonido de las bombas.
El registro muestra al padre, Abdullah Al-Mohammad, mientras le enseña a su hija, Salwa, a reír justo en el momento en que se escucha caer una bomba en el sector, con el fin de calmarla y distraerla.
¿Es un avión o una bomba?», le pregunta Abdullah a la pequeña, a lo que ella responde: «Una bomba». A los segundos se escucha a lo lejos una fuerte explosión, por lo que Salwa lanza una gran carcajada y disfruta el momento con su padre.
El video ha sido compartido por cientos de personas en las redes sociales, que calificaron de héroe al padre, y varios compararon el momento con la película La Vida es Bella, de Roberto Benigni, en la que un padre inventa un juego para proteger a su hijo en un campo de concentración nazi.
Abdullah contó a Sky News, que el juego es para proteger a Salwa de la «crisis psicológica» que viven muchos niños de la comunidad. «Es una niña que no entiende la guerra», agregó.
La familia de Abdullah se ha visto obligada a tener que huir de su casa en Saraqib debido a la guerra. Ahora, viven con un amigo en un pueblo cerca de la provincia de Idlib, Saramada, donde siguen rodeados de constantes explosiones.
La guerra en Siria
La guerra de Siria fue catalogada por la ONU como «la mayor historia de terror humanitario del siglo XXI». Desde el primero de diciembre alrededor de 900.000 personas han debido abandonar sus casas por la ofensiva siria y sus aliados rusos en la frontera con Turquía, la mayoría mujeres y niños, según El País de Uruguay.
Mark Lowcock, secretario general adjunto de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, dijo que las personas se encuentran traumatizadas; obligadas a dormir fuera, con temperaturas gélidas, porque los campos de refugiados están llenos. «Las madres queman plásticos para que sus hijos se calienten un poco. Bebés y niños pequeños mueren de frío».