La OTAN aseguró este miércoles que no hubo bajas entre el personal de su misión de entrenamiento del Ejército y las fuerzas de seguridad en Irak luego del ataque iraní.
«De acuerdo con nuestra evaluación, podemos confirmar que no hubo bajas entre aquellos que sirven en la misión de la OTAN en Irak», declararon fuentes aliadas.
Añadieron que la organización está tomando todas las precauciones necesarias para proteger al personal y que están examinando la situación de cerca.
Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, rechazó el ataque de Irán contra las bases iraquíes con presencia estadounidense.
«Condeno los ataques iraníes con misiles sobre fuerzas de Estados Unidos y de la coalición, contra la organización terrorista Estado Islámico, en Irak», escribió el político noruego en Twitter.
La OTAN sigue manteniendo consultas y permanece comprometida en su misión de entrenamiento del Ejército y las fuerzas de seguridad en Irak, a pesar de que el sábado la Alianza decidió suspender de forma temporal las actividades de esa iniciativa.
Además, anunció que reposicionará temporalmente parte de su personal en Bagdag a diferentes localizaciones dentro y fuera del país para proteger a su personal.
Ataque y reacciones
Irán atacó la base militar Ain al Asad, situada en Irak, en respuesta al asesinato de Qasem Soleimani. En esa base están desplegadas tropas estadounidenses.
Más de una decena de misiles balísticos impactaron en dos bases aéreas: Ain al Asad y Erbil, de acuerdo con el Pentágono.
Su vocero, Jonathan Hoffman, afirmó que hasta el momento no se conoce si hay víctimas, por lo que están evaluando los daños.
Fuentes policiales y militares iraquíes confirmaron en principio a EFE que solo fue bombardeado Ain al Asad y no el de Erbil.
En Ain al Asad hay soldados estadounidenses en el marco de la coalición internacional liderada por Estados Unidos en lucha contra el Estado Islámico.