El rechazo del presidente Daniel Ortega al ingreso de una comisión de la OEA a Nicaragua es por «temor» a que se sepan «sus mentiras y artimañas» sobre la crisis, aseguró este domingo la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco.
«Esta actitud muestra tanto el temor a que le desvelen una vez más in situ todas sus mentiras y artimañas que ya no puede esconder», sostuvo la Unidad, organización más amplia de opositores nicaragüenses.
«La negativa de la dictadura a permitir la entrada de la misión de la OEA, además de improcedente e irracional, es otra muestra de su falta de voluntad a escuchar las justas demandas del pueblo», destacó la Unidad.
Nicaragua prohibió el sábado el ingreso de siete diplomáticos que buscaban impulsar un diálogo entre el gobierno y la oposición.
La comisión, integrada por orden de la Asamblea General de la OEA, cuenta con representantes de Argentina, Canadá, Estados Unidos, Jamaica y Paraguay.
Entre ellos Carlos Trujillo, embajador de Estados Unidos ante la OEA, y Gonzalo Koncke, jefe de Gabinete del secretario general del organismo, Luis Almagro.
«Con este repudiable hecho, la dictadura muestra su decisión de mantener una política de terrorismo de Estado. Además de permanente violación a nuestros derechos humanos y a los principios y compromisos de la Carta Democrática Interamericana», agregó la Unidad.
328 muertos
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos señala al gobierno de Nicaragua como responsable de crímenes «de lesa humanidad» en el marco de la crisis.
Hasta la fecha ha dejado al menos 328 muertos, según sus estadísticas.
Un proceso de aplicación de la Carta Democrática Interamericana se mantiene abierto para Nicaragua.
Esto, por «rompimiento del orden constitucional» y, de ejecutarse, suspendería al país del organismo.