La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados mostró su “profunda preocupación” por la detención, sin cargos, de 59 colombianos en Venezuela, durante más de 2 años, que fueron arrestados en diferentes operaciones de seguridad entre agosto y septiembre de 2016, y están todos retenidos en una sola celda del centro de detención de La Yaguara, según la Oficina.
“Las condiciones allí son nefastas, con un acceso insuficiente a comida, agua y medicinas”, afirmó en rueda de prensa Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina, citó EFE. Los colombianos fueron detenidos durante las denominadas Operaciones para la Liberación del Pueblo. “Las 59 personas están acusadas de ser paramilitares colombianos, pero hasta la fecha no hay evidencias o cargos contra ellas”, subrayó la portavoz.
Shamdasani recordó que el Juzgado 27 de Control del área metropolitana de Caracas ordenó la libertad de los colombianos el 21 de noviembre de 2017 y sin embargo estos siguen detenidos. “Pedimos a las autoridades venezolanas que cumplan con esta decisión y los liberen”, aseguró la portavoz. También denunció que “muchos de los hombres parece que están enfermos. Urgimos a las autoridades venezolanas a que se aseguren que los detenidos reciben la asistencia médica necesaria”.
Shamdasani afirmó que, según demostró un informe elaborado por su Oficina, las condiciones de los detenidos en Venezuela son “más allá de monstruosas”.
“Las infraestructuras están infectadas con ratas e insectos, no todos los detenidos tienen acceso a luz natural y en muchos centros tienen un acceso limitado a agua y comida”. Denunció también que muchos de los reclusos sufren enfermedades como hipertensión, tuberculosis, malaria, VIH-Sida y que a pesar de ello “no obtienen la asistencia médica necesaria”.