La ONU confirmó este viernes que al menos 269 personas fallecieron en las protestas en Irak.
Las manifestaciones han sido duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad y en medio de las cuales otros grupos armados perpetraron asesinatos deliberados.
En horas de la mañana de este viernes, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra fue informada de la muerte de cinco manifestantes, asesinados la noche anterior frente al edificio de la gobernación de Basora.
Además de los muertos, se contabilizaron al menos 8.000 heridos entre el primero de octubre y el 7 de noviembre. En esta lista figuran también agentes de seguridad y militares.