El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas alertó este martes de una «emergencia» alimentaria, ya que de las casi 300.000 personas que han llegado a Sudán del Sur en los últimos cinco meses por la guerra en Sudán, 90% de las familias afirma pasar varios días sin comer y uno de cada cinco niños se encuentra desnutrido.
«Estamos viendo cómo las familias dejan un desastre por otro al huir del peligro en Sudán sólo para encontrar la desesperación en Sudán del Sur», indicó la directora del PMA en Sudán del Sur, Mary-Ellen McGroarty, en un comunicado.
Una nueva evaluación de la seguridad alimentaria realizada por el PMA muestra que 90% de las familias retornadas sufren inseguridad alimentaria moderada o grave, mientras que los datos del cribado del paso fronterizo revelaron que casi 20% de los niños menores de cinco años y más de una cuarta parte de las mujeres embarazadas y lactantes están desnutridos.
Casi todos los que han cruzado la frontera desde que estallaron los combates en Sudán a mediados de abril son sursudaneses y regresan a un país que ya se enfrenta a necesidades humanitarias sin precedentes.
La estación de lluvias ha dificultado aún más las condiciones en los abarrotados centros de tránsito y pasos fronterizos, y las inundaciones han empeorado la inseguridad alimentaria y contribuido a la propagación de enfermedades, según el PMA, que añadió que muchas familias han denunciado «haber sido víctimas de robos y violencia al huir de la guerra en Sudán y cruzar la frontera con Sudán del Sur con lo puesto».
«Los que llegan hoy se encuentran en una situación aún más vulnerable que las familias que huyeron en las primeras semanas del conflicto.», apuntó.
En todo Sudán del Sur, el PMA tiene un déficit de financiación de 536 millones de dólares para los próximos seis meses y sólo ha podido llegar a 40% de las personas en situación de inseguridad alimentaria con asistencia alimentaria en 2023.
Más de 5,4 millones de personas se han visto obligadas a desplazarse de manera interna y externa en Sudán por el conflicto que estalló en el país el pasado 15 de abril, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El conflicto en Sudán se inició después de que el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) se rebelaran contra el Ejército y, hasta el momento, la guerra ha dejado entre más de 1.000 y 5.000 muertos, de acuerdo a diferentes estimaciones.