La región ucraniana de Odesa, en el sur de Ucrania, está de luto este sábado por los 21 fallecidos en el ataque ruso ruso con misiles contra una zona residencial el viernes. Este se ha considerado como el más mortífero hasta la fecha, indicó este sábado el jefe de la Administración Militar de la provincia, Oleg Kiper.
«Hoy, la ciudad y la región declararon luto por los 20 muertos causados como consecuencia del ataque terrorista ruso más masivo en Odesa en términos de número de víctimas», escribió en su canal de Telegram.
Poco después el ministro ucraniano del Interior, Igor Klimenko, elevó el número de víctimas mortales a 21. Esto tras la muerte de un segundo empleado del Servicio Estatal de Emergencia, que falleció a causa de sus heridas en un hospital.
Kiper, que expresó una vez más sus condolencias a las familias de las víctimas, había indicado a última hora del viernes que entre los muertos se encontraban un médico; así como un socorrista del Servicio Estatal de Emergencia.
Según dijo la víspera el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dos misiles balísticos Iskander-M golpearon Odesa; el segundo justo cuando las emergencias y los médicos habían llegado al lugar del primer impacto.
Kiper señaló este sábado que, hasta las 07.00 GMT, 40 heridos de los 75 que resultaron heridos aún estaban recibiendo tratamiento en centros médicos y que nueve de ellos se encuentran en estado grave.