Estados Unidos anunció este viernes una nueva ayuda militar de casi 2.200 millones de dólares para Ucrania, que incluye artefactos disparados desde tierra que casi podrían duplicar el alcance de la fuerza de ataque ucraniana contra los rusos.
Se trata de las Bombas de Pequeño Tamaño Lanzadas desde Tierra (GLSDB por sus siglas en inglés), misiles de pequeño diámetro fabricadas por Boeing y Saab que pueden volar hasta 150 km y, por lo tanto, amenazar las posiciones rusas.
«Esto les da una capacidad de mayor alcance (…) que les permitirá realizar operaciones en defensa de su país y recuperar su territorio soberano», afirmó el portavoz del Pentágono, Pat Ryder.
Ucrania pedía a Estados Unidos municiones que puedan volar más lejos que los cohetes HIMARS, con un alcance de 80 kilómetros.
Las GLSDB proporcionan a Ucrania la capacidad de atacar posiciones en el Donbás, Zaporijia, Jersón y el norte de Crimea.
Eso podría amenazar las principales líneas de suministro rusas, los depósitos de armas y las bases aéreas.
Ryder dijo que desconoce cómo Ucrania usará la munición.
Este apoyo de casi 2.200 millones de dólares también incluye «capacidades de defensa aérea cruciales para ayudar a Ucrania a defender a su población», «vehículos de infantería blindados» y municiones para el sistema de lanzamiento de cohetes HIMARS, informó el Pentágono.
Desde el comienzo de la invasión rusa a finales de febrero de 2022, las autoridades estadounidenses han destinado más de 29.300 millones de dólares a ayudar militarmente a Ucrania, según el Pentágono.
«Estados Unidos continuará trabajando con nuestros aliados y socios para proporcionar a Ucrania las capacidades para responder a las necesidades inmediatas en el campo de batalla y las de seguridad a más largo plazo», dijo el Pentágono.