Karolina Fernández, de 22 años de edad, murió luego de caer al vacío desde un piso 14, puesto que la puerta del ascensor se abrió sin que llegara la cabina.
El encargado de reparaciones fue proceso sin prisión preventiva por el “homicidio culposo”, de la estudiante brasileña, así lo reportaron fuentes judiciales.
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Cinthia Oberlander, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 17, y Manuel de Campos, responsable del Juzgado Nacional en lo Criminal, investigaron que el implicado era el responsable del estado técnico de ese ascensor.
El 31 de agosto, 4 días antes que ocurriera el accidente que le quitó la vida a Fernández, se debió realizar la revisión técnica mensual de esos artefactos.
Por otro lado, el responsable de la supervisión al momento de declarar confesó que no pudo manejar a la perfección la puerta del ascensor, debido a que esta- la que controla el piso 14- posee una llave electromagnética que no permite que se abran las puertas una vez que el ascensor no está.
El control del técnico especificó que el ascensor se podía usar, puesto que el técnico giró solo alrededor del resorte existente, que debió hacer que funcionara el ascensor, así lo consignó Télam.
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Por pedido de la fiscalía, el personal de la Oficina de Siniestros de la Policía de la Ciudad llevó a cabo un peritaje sobre el sistema de apertura de la puerta del ascensor.
Este perito determinó que existió una falla en la cerradura electromecánica que permitía la apertura de la puerta, aun cuando no estuviera la cabina.