El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó este miércoles que no tiene «invitación oficial ni información» sobre el Foro Latinoamericano de Derechos Humanos que tendrá lugar los días 23, 24 y 25 de enero en Chile. No obstante, hay un comunicado que informa la invitación al ex mandatario.
«No tengo invitación oficial ni información sobre un evento de Derechos Humanos en Chile. Antes, cuando era dirigente, los racistas me declaraban persona no grata. Ahora como presidente indígena, piden mi detención», publicó Morales desde Argentina en su perfil de Twitter.
La organización del Foldah publicó ayer en su portal digital un comunicado en el que afirmaba que «el senador progresista Alejandro Navarro –impulsor del encuentro- envió formalmente la invitación» a Morales «para que modere una de las mesas de trabajo de la actividad».
El ex mandatario «fue invitado a participar como expositor» en una actividad «prevista para el día 24 de enero, instancia en la que se abordará la crisis del modelo neoliberal, estallidos sociales en el mundo y violación institucional de los Derechos Humanos».
«Su visita, sin embargo, aún no ha sido confirmada, pero en caso de que el mandatario no pueda participar de manera presencial, está previsto que lo haga a través de videoconferencia, explican los organizadores del encuentro internacional», continúa el comunicado.
Exilio y nuevo cargo
Morales se encuentra en Argentina desde el pasado 12 de diciembre, donde solicitó refugio político. Ahora está inmerso en el rol de jefe de campaña de su partido, el Movimiento al Socialismo. En las próximas semana esta organización elegirá candidato para los comicios bolivianos del 3 de mayo.
El mes pasado la Fiscalía boliviana emitió una orden de detención en su contra para que preste declaración informativa por una denuncia de terrorismo. El gobierno interino de Jeanine Áñez la presentó en noviembre pasado.
La denuncia lo acusa de incitar a la violencia contra el Ejecutivo provisional desde su asilo en México. La denuncia se sustenta en pruebas como un video en el que se oye una voz atribuida a Morales. Sin embargo, fuentes independientes no han comprobado su autenticidad.