Un atentado terrorista contra una brigada militar colombiana en Cúcuta, en la que había personal de Estados Unidos, dejó este martes 36 heridos, entre ellos dos civiles, informó el ministro de Defensa, Diego Molano, quien agregó que se sospecha de la guerrilla del ELN.
Molano se trasladó a Cúcuta, limítrofe con Venezuela, donde dijo que, a raíz del ataque con una camioneta bomba en la sede de la Trigésima Brigada del Ejército, «36 personas resultaron heridas hasta el momento, tres de ellas presentaron algún nivel de gravedad y una de ellas ya fue intervenida quirúrgicamente».
En la unidad atacada había un pequeño grupo de militares estadounidenses que no sufrieron daños, según la embajada de ese país.
«Un reducido número de militares estadounidenses se encontraba en la base militar colombiana, en Cúcuta, realizando un entrenamiento con una unidad colombiana, en el momento de la explosión. Todo el personal de Estados Unidos ha sido verificado y no hay reportes de heridos serios», informó la embajada en un mensaje en Twitter.
La misión diplomática agregó que «Estados Unidos se enorgullece de su cooperación duradera con las Fuerzas Armadas de Colombia, que incluye entrenamientos y ejercicios conjuntos».
Hipótesis apunta al ELN
Por su parte, el ministro explicó que la primera hipótesis del que llamó «acto demencial y vil» apunta a que el autor sería la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), aunque también se investiga si en el hecho están involucradas las «disidencias de las FARC, del Grupos Armados Organizados 33».
En el departamento de Norte de Santander, cuya capital es Cúcuta, hay fuerte presencia del ELN, de las disidencias de las FARC y otros grupos criminales que se disputan el control de las siembras de coca y de las rutas del narcotráfico.
Molano añadió que una camioneta blanca cargada con explosivos entró a las instalaciones militares con dos hombres que suplantaron a funcionarios públicos y poco después ocurrieron dos explosiones.
La forma como fue perpetrado el atentado es similar al cometido el 17 de enero de 2019 por el ELN, que hizo explotar un carro bomba en la Escuela de Cadetes de Policía General Santander de Bogotá, en el que murieron 22 cadetes, entre ellos una ecuatoriana, y otras 67 personas resultaron heridas.
Dos explosiones
Molano detalló que la primera explosión ocurrió hacia las 15.10 locales (20.10 GMT) y dos minutos después ocurrió una segunda más fuerte que afectó las edificaciones de la brigada.
«Rechazamos y repudiamos este acto terrorista y vil que buscó atentar contra los soldados de Colombia en la brigada», enfatizó el ministro, quien agregó que los autores «son unos canallas que buscan afectar la integridad de nuestros soldados».
La embajada estadounidense también lamentó los heridos entre el personal colombiano.
«Con dolor y tristeza enviamos nuestra solidaridad a los miembros del Ejército de Colombia heridos en Cúcuta. La cooperación con las Fuerzas Armadas colombianas es uno de los pilares en nuestros esfuerzos por combatir el crimen transnacional en la región», manifestó.
Ante la gravedad de la situación, el presidente colombiano, Iván Duque, también decidió trasladarse a Cúcuta para reunirse «con la cúpula de la fuerza pública y las autoridades de la ciudad y el departamento para supervisar de manera directa la situación».
Las explosiones, que se vieron desde barrios vecinos, afectaron especialmente un área de oficinas que, según algunos militares, estaban vacías ya que parte del personal de la brigada, adscrita a la Segunda División del Ejército, está en cuarentena por coronavirus.