El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, indicó que «no hay una sola persona» de las agencias de seguridad de EE UU que participe en la búsqueda en el territorio mexicano, pero destacó que esa nación sí apoya con información.»Estamos trabajando en su captura, pero sería irresponsable decir que lo tenemos en un solo lugar o que estamos rodeándolo», afirmó. El secretario se negó a precisar un plazo para concretar la detención del líder del cártel de Sinaloa.El 11 de julio, Guzmán huyó del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el central estado de México, a través de un túnel de 1,5 kilómetros con la ayuda de más de una treintena de personas, la mayoría funcionarios de la cárcel.Según la investigación de la fiscalía, tras salir del túnel -que conectaba su celda con una casa en construcción- el capo viajó por tierra hasta San Juan del Río, en el central estado de Querétaro, donde tomó una avioneta que lo llevó al Triángulo Dorado, una zona montañosa entre los estados Sinaloa, Durango y Chihuahua. Osorio Chong aclaró que si Guzmán fuera detenido en este momento, no podría ser extraditado de inmediato a Estados Unidos ya que «el proceso no está terminado». Además, aseguró que el gobierno mexicano nunca ocultó la existencia de videos sobre la fuga del narcotraficante, pero no explicó por qué solo mostró una pequeña parte de ellos, ni por qué omitió la difusión del audio. Reconoció que las imágenes del momento de la fuga muestran «debilidades» del sistema y los protocolos de seguridad al interior de la prisión, las cuales se han venido corrigiendo no solo en este penal, sino en los otros de máxima seguridad del país. Sobre las 34 personas detenidas y puestas a disposición de un juez por la fuga, entre funcionarios que facilitaron la evasión y presuntos miembros del cártel de Sinaloa que ayudaron a «El Chapo» a escapar, indicó que «no todos tienen el mismo grado de participación». Algunos de ellos tienen responsabilidad por «omisión», afirmó el ministro, quien calificó como «serio» el trabajo que realiza la Procuraduría General de la República en torno a la fuga del capo, la segunda tras la que protagonizó en 2001.