«Los populistas que argumentan que el coronavirus es inofensivo son peligrosos e irresponsables». Así lo aseguró Angela Merkel, canciller de Alemania.
La segunda la de contagios por coronavirus en Europa continúa golpeando con fuerza. Esto ha obligado a los gobiernos a tomar medidas radicales para combatir la pandemia. En este sentido, la canciller de Alemania, Angela Merkel anunció este miércoles una serie de restricciones para contener las infecciones. Y este jueves, las defendió, al tiempo que advirtió de la propaganda y las teorías conspiracioncitas para socavar la lucha contra la pandemia.
“Déjenme ser clara: mentiras y desinformación, conspiración y odio no solo dañan el debate democrático sino también la lucha contra el coronavirus”, dijo Merkel ante la Cámara baja del Parlamento alemán.
Las medidas entrarán en vigor partir del lunes 2 de noviembre e incluyen el cierre de restaurantes, instituciones culturales y el sector de ocio, como los cines, salas de concierto y teatros, o las piscinas. Asimismo, anunció ayudas de hasta 10 millardos de euros para que la economía enfrente el choque.
La alerta no es solo de Merkel
Emmanuel Macron, presidente de Francia, informó este miércoles que su país vuelve al confinamiento para evitar la expansión del coronavirus. Detalló que la medida no aplicará para las escuelas en el país.
“El virus circula en Francia a una velocidad que ni los más pesimistas vaticinaban”, dijo el presidente después de anunciar que en las últimas 24 horas se han registrado al menos 70.000. Más de la mitad de la capacidad de las UCI está ya ocupada y el martes, el país superó los 500 fallecidos.