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Masiva asistencia de simpatizantes en ceremonia fúnebre de Fujimori, en Perú

por Avatar AFP

Con una ceremonia religiosa, comenzó este sábado la despedida solemne del expresidente de Perú, Alberto Fujimori, antes de que su cuerpo  trasladado al palacio de gobierno donde recibirá honores de Estado, previo a su entierro en Lima.

La ceremonia se lleva a cabo en el Gran Teatro Nacional, con capacidad para 1.500 personas y contiguo al ministerio de Cultura donde el cuerpo fue velado desde el jueves.

Al edificio, donde fue instalado el altar con rosas blancas y una imagen del expresidente reproducida a gran escala, solo ingresaron sus familiares y allegados.

De origen japonés, pero conocido popularmente como «El chino», el exmandatario (1990-2000) murió el miércoles a los 86 años en su vivienda de Lima acompañado por sus hijos Keiko y Kenji.

Fujimori falleció después de cuatro meses de tratamiento contra un cáncer de boca.

El oficio religioso es seguido por cientos de simpatizantes a través de una pantalla gigante instalada en las afueras del teatro.

Simpatizantes acompañan honras fúnebres de Fujimori

Desde temprano cientos de simpatizantes, con muñecos o fotos de Fujimori con la banda presidencial, se agolparon frente a las apuertas para acompañar las honras fúnebres.

Emocionados, entonaron el «ritmo del chino», la canción de la última campaña presidencial de Fujimori o el estribillo «chino valiente aquí está tu gente».

Este «hombre que pacificó al país tuvo los pantalones bien puestos para luchar contra el terrorismo», señaló Édgar Grados, un comerciante de 43 años.

«Desde mañana a seguir con su legado, porque el fujimorismo nunca muere; seguirá en la historia con todas su ideas y trabajo», agregó el hombre, que aseguró haber viajado más de 100 km para despedir a su líder.

En diciembre, Fujimori había sido indultado por razones humanitarias cuando cumplía una condena de 25 años por homicidio, secuestro y otros graves abusos cometidos por militares en su lucha contra la guerrilla maoísta de Sendero Luminoso.

Con un estilo autoritario y populista, Fujimori enfrentó un periodo turbulento marcado por la crisis hiperinflacionaria y la violencia indiscriminada de Sendero Luminoso, a la que finalmente doblegó a sangre y fuego.