Más de 5.300 personas resultaron detenidas en Rusia, entre ellas 1.800 en Moscú, durante las protestas pro-Navalny del domingo. Así lo afirmó este lunes la ONG OVD-Info, mientras que la fiscalía rusa justificó la encarcelación del opositor ruso.
En San Petersburgo, segunda ciudad de Rusia, detuvieron a 1.176 personas, agregó la ONG, especializada en el seguimiento de las manifestaciones.
Por segundo fin de semana consecutivo, hubo manifestaciones en numerosas ciudades de Rusia para exigir la liberación del principal opositor al Kremlin, Alexéi Navalny, encarcelado desde el 17 de enero, cuando regresó de Alemania, donde estuvo cinco meses tras un envenenamiento del cual acusa al presidente ruso Vladimir Putin.
El martes, Alexéi Navalny debe comparecer ante un tribunal por violación del control judicial. Corre el riesgo de que la pena en suspenso pronunciada en 2014 sea transformada en encarcelamiento, como lo solicita la administración penitenciaria.
El lunes, la fiscalía rusa dijo que apoyaba el pedido de encarcelamiento por considerarlo «legal y justificado».
El tribunal podría ordenar la encarcelación de Navalny durante un período de dos años y medio a tres, ya que una parte de la pena la cumplió bajo libertad vigilada.
El opositor ruso enfrenta otros juicios, entre ellos uno por difamación previsto el viernes próximo.
Los partidarios de Navalny fueron llamados a concentrarse el martes delante del tribunal Simonovski de Moscú, donde será juzgado el opositor.