La tormenta tropical María se fortaleció y se convirtió este domingo en un huracán de categoría 1 en su ruta hacia las Antillas Menores y Puerto Rico, que ya se preparan para su llegada en los próximos días.
El tifón, que presenta vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora, se dirige hacia las Antillas Menores, recientemente golpeadas por el paso devastador del huracán Irma.
Estas islas, así como Puerto Rico y Cuba, sufrieron recientemente los embates de Irma, con casos dramáticos como el de Barbuda, devastada en más de 90 % según sus autoridades y que aún no termina las tareas de reconstrucción.
En su boletín de las 21.00 horas GMT, el CNH señaló que María se encuentra a 225 kilómetros al este-noreste de Barbados y a 445 kilómetros al este-sureste de Dominica.
La potencial amenaza que supone María se concreta apenas una semana después del paso del huracán Irma por estas islas del Caribe, Puerto Rico y el sureste de EE UU, país en donde propició más de una treintena de muertes, y que tiene a estados como Florida de a pocos tomando el camino a la normalidad.
En el extremo sur de este estado, en los Cayos, se inició este domingo el tramo final de la operación retorno para las decenas de miles de los residentes que evacuaron este conjunto de islas, de más de 177 kilómetros de largo y sin duda una de las más afectadas por el paso del poderoso ciclón Irma.
Las autoridades del Condado Monroe, donde se asientan los Cayos, han pedido a sus residentes que a su regreso lleven consigo las provisiones suficientes para autoabastecerse durante un tiempo, ya que servicios básicos como luz, agua y desagüe aún no están restaurados del todo.
«Los Cayos no son lo que ustedes dejaron varios días atrás cuando evacuaron. La electricidad, el alcantarillado y el agua potable funcionan de manera intermitente, en el mejor de los casos», advirtió el alcalde del condado Monroe, George Neugent, durante una rueda de prensa el sábado, cuando se permitió el acceso hasta el Cayo Marathon.
El ojo de Irma tocó tierra el pasado domingo en el Cayo Cudjoe, con categoría 4 y vientos máximos sostenidos de 215 kilómetros por hora tras lo cual prosiguió por la costa del suroeste de Florida, dejando a su paso una estela de devastación e inundaciones en ciudades como Naples o Jacksonville.
El sábado, las autoridades del Condado Monroe dieron a conocer que por lo menos nueve personas han perdido la vida por causas atribuibles a Irma, que obligó a las autoridades condales a impedir el retorno de sus residentes hasta este fin de semana.
Al día de hoy, domingo 17 de septiembre, 37 % de viviendas y oficinas de esta localidad no cuenta aún con suministro eléctrico, mientras que, en todo el estado, un total de 675.753 de clientes de las operadoras de electricidad, es decir 6,44 % de cuentas, se halla en la misma situación, según datos de la División de Gestión de Emergencias de Florida.
De acuerdo a esta oficina, del pico de 6,7 millones de clientes que quedaron a oscuras hace una semana actualmente 93,5 % ya cuenta con energía, tras las labores de restablecimiento del tendido eléctrico efectuado por un batallón de más de 30.000 operarios.
En Miami-Dade, el más poblado del estado, todavía 11 % no cuenta con suministro de energía, entre los que se cuentan algunos colegios, no obstante, las autoridades de este distrito escolar anunciaron este domingo que las clases se reanudarán el lunes, tras el cierre de las aulas el pasado 6 de septiembre como medida de previsión.
El anuncio de este distrito escolar sigue al del vecino condado Broward, que este fin de semana también confirmó que el lunes se retomaran las clases. En Monroe, sin embargo y donde se mantiene un toque de queda nocturno en algunas áreas, las clases no se reiniciarán hasta el 25 de septiembre.
A los fallecimientos ocurridos en los Cayos hay que sumar los ocho ancianos que perdieron la vida en un asilo en la ciudad de Hollywood, al norte de Miami, en un caso ha merecido la repulsa de las autoridades y hasta una demanda de familiares de las víctimas.
Abogados en representación de Albertina Vega, de 99 años, una de las víctimas, presentaron una «queja de emergencia» en una corte del condado de Broward encaminada a preservar documentos y vídeos, aunque las autoridades policiales locales ya han abierto una investigación criminal por este hecho.
Entre la noche del martes y miércoles de esta semana, ocho personas con edades entre 70 y 96 años murieron por problemas derivados de la falta de funcionamiento del aire acondicionado en este centro de ancianos, que permanece cerrado, mientras que otras 115 fueron evacuadas.
La cifra provisional de muertes relacionadas con el paso del huracán Irma por el sureste de EE.UU. (Florida, Georgia y Carolina del Sur) asciende por lo menos a 39, sin que se conozca el balance final de daños y pérdidas materiales, que tardará meses en determinarse.