Un grupo de manifestantes se enfrentó este martes por cuarto día consecutivo con la policía libanesa en los alrededores del Parlamento en Beirut, con saldo parcial de al menos 42 heridos de diversa consideración.
La Cruz Roja libanesa informó que tuvo que trasladar a 10 de los heridos a centros hospitalarios y prestó atención sanitaria al resto en el lugar de los hechos.
Los enfrentamientos se registraron después de una concentración frente al puerto, origen de la masiva explosión de cerca de 3.000 toneladas de nitrato de amonio de hace una semana que dejó 171 fallecidos y más de 6.000 heridos, y de una marcha con velas por el centro de la capital del Líbano.
Algunos manifestantes arrojaron piedras a los policías que protegían la sede del Legislativo y estos respondieron con gases lacrimógenos.
Dimisión del ministro Hasan Diab
La intensidad de los choques fue menor que en jornadas anteriores tras la presentación de la dimisión en bloque del gobierno encabezado por el primer ministro Hasan Diab.
Los más grave tuvieron lugar el sábado, cuando murió un agente de policía y hubo 250 heridos de diversa consideración, según la Cruz Roja libanesa.
Amnistía Internacional denunció este martes que durante las jornadas previas miembros del Ejército y las Fuerzas de Seguridad, así como hombres vestidos de civil sin identificar, dispararon bombas de gases lacrimógenos y perdigones de forma indiscriminada contras manifestantes desarmados.
De acuerdo con la organización defensora de los derechos humanos, hubo uso desmedido e injustificado de la fuerza contraviniendo las directrices internacionales contra manifestantes y los médicos que les atendían, por lo que una persona perdió un ojo y varias más resultaron con heridas oculares.
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