Nicolás Maduro calificó este miércoles de »festín de odio» el encuentro que sostuvo el presidente estadounidense, Donald Trump, con su homólogo colombiano, Iván Duque, en Washington y donde abordaron la situación de Venezuela.
«Hoy el presidente de EE UU se reunió con el señor Iván Duque de Colombia, como un festín del odio. Si uno le ve los ojos a la postura, las declaraciones, es un festín de odio contra Venezuela», dijo en una alocución transmitida por el canal estatal VTV, en la que también indicó que, a su juicio, las declaraciones de los presidentes fueron «ruines».
Maduro pidió nuevamente la solidaridad del mundo ante lo que considera «amenazas» de EE UU, rechazó las declaraciones de Trump en las que dijo que tenía un «plan B, C y D» para Venezuela si él no abandona el poder.
El gobierno estadounidense considera que Maduro es «ilegítimo» por haber sido electo en unos comicios calificados como fraudulentos, y apoya al jefe del Parlamento, Juan Guaidó, a quien ha reconocido como presidente encargado de Venezuela, luego de que asumiera el cargo el 23 de enero.
Sin embargo, para Maduro, Guaidó es un «títere» de EE UU, país al que acusa de querer invadir Venezuela para apropiarse de las riquezas.
Según Maduro, «el imperio estadounidense, rabioso, lleno de odio, pretende chantajear al mundo entero, que el mundo entero se pliegue a sus planes guerreristas».
En ese sentido, pidió nuevamente al mundo «su solidaridad» y unirse a la campaña «Manos fuera de Venezuela».
«Le pido al pueblo de Venezuela incorporarse en las plazas Bolívar a firmar el documento que vamos a llevar en marcha hasta Washington para exigirle a Donald Trumpque saque sus manos de Venezuela», indicó.
Además, denunció un supuesto bloqueo a unas semillas que Venezuela iba a importar y acusó a Trump de estar detrás de este «saboteo».
En la reunión de este jueves Trump no descartó un posible despliegue militar en Colombia al recibir a Duque, con el que mostró un frente unido en lo relativo a Venezuela, al tiempo que criticó el bloqueo de Maduro a la ayuda humanitaria solicitada por el Parlamento.