Los talibanes prohibieron a las mujeres trabajar como locutoras y en cualquier otro puesto en las radios de la provincia de Ghanzni, en el sureste de Afganistán.
Además, vetaron la música en estas emisoras, según recoge la agencia de noticias afgana Pajhwok.
Este mismo sábado se conoció un edicto religioso que ordena la suspensión de la educación conjunta para hombres y mujeres en las universidades e institutos de la provincia de Herat, en el oeste del país.
El responsable del «Departamento de Educación» del Emirato Islámico de Afganistán, el mulá Farid, argumentó que la educación mixta debía terminar al tratarse de la raíz de los males de la sociedad.
Los talibanes estarían dispuestos a admitir que las jóvenes reciban educación de «profesoras virtuosas» y de «varones ancianos». Los profesores de Herat han avisado que este edicto privará a miles de mujeres de recibir una educación superior en la práctica al no existir infraestructura suficiente para dividir las clases.
Ghazni y Herat son algunas de las provincias que han caído en manos de los talibanes en la ofensiva relámpago de los insurgentes islamistas que culminó con la caída de Kabul el pasado 15 de agosto.